El debate migratorio y la disparidad de recetas amenazaba con hacer descarrilar la Cumbre de la Alhambra, desnudando las costuras de los Veintisiete. Lo hizo el jueves cuando Sunak y Meloni lideraron una reunión paralela con Francia, Países Bajos y Albania, para mayor enfado español. Y este viernes, para evitar el fracaso, la declaración de Granada ha sido adoptada dejando a un lado el tema migratorio.

La reunión informal de jefes de Estado y Gobierno de la UE se ha cerrado con una Declaración de Granada que evita el asunto migratorio ante las críticas de Polonia y Hungría, visiblemente incómodas con el acuerdo del Pacto de Migración y Asilo a pesar de que Alemania terminó cediendo para lograr el plácet de Italia.

"El esfuerzo ha valido la pena. Granada está vinculada ya al esfuerzo de avanzar en el proyecto europeo", ha declarado el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, en la rueda de prensa que ha compartido con los presidentes de la Comisión y Consejo europeos, Ursula von der Leyen y Charles Michel, y que ha marcado el final de la cumbre, la principal cita de la presidencia española del Consejo de la UE.

Hay declaración. Lo que no hay es un párrafo vinculado a la migración

PEDRO SÁNCHEZ

"Hay declaración. Lo que no hay es un párrafo vinculado a la migración. Este es un consejo informal. Para mí lo más importante es que lo que han logrado los ministros de interior con el reglamento de crisis, porque va a permitir desbloquear el Pacto. Esto no empaña la cumbre. Sabíamos que éste era uno de los riesgos", ha agregado.

Los líderes de la UE tampoco han obviado la sensibilidad y la división que suscita el asunto. "Confío en que busquemos soluciones a la migración", ha deslizado Von der Leyen. "Los debates de migración han sido en los últimos años difíciles y emocionales. Hay que felicitarse con el paso adelante. Hace años que no habíamos avanzado en materia de política migratoria", ha apuntado Michel.

Párrafo del presidente del Consejo

El presidente del Consejo, Charles Michel, ha ofrecido bajo su nombre una declaración sobre la migración, que es básicamente el párrafo eliminado del borrador de la declaración. “La migración es un reto europeo que requiere una respuesta europea. La migración irregular debe abordarse de inmediato y con determinación. No permitiremos que los traficantes decidan quién entra en la UE. Seguiremos aplicando eficaz y rápidamente todas nuestras decisiones”, señala el texto.

No permitiremos que los traficantes decidan quién entra en la UE

charles michel, presidente del consejo de la ue

“Aplicaremos un enfoque global de la migración que combine una mayor acción exterior, asociaciones globales mutuamente beneficiosas con los países de origen y de tránsito, el tratamiento de las causas profundas de la migración, las oportunidades de migración legal, una protección más eficaz de las fronteras exteriores de la UE, la lucha resuelta contra la delincuencia organizada, la trata y el tráfico de seres humanos, la instrumentalización de la migración como amenaza híbrida, la intensificación de los retornos y los aspectos internos, de conformidad con el Derecho internacional, los principios y valores de la UE y la protección de los derechos fundamentales”, agrega.

Mayoría cualificada para aprobar el pacto migratorio

En unas declaraciones previas el presidente francés Emmanuel Macron ha restado valor a la existencia de una declaración final conjunta de la cumbre subrayando que el papel de los líderes es definir una estrategia común y tomar decisiones. Ha recalcado, además, que la toma de decisiones en el seno de la UE seguirá adelante con una mayoría cualificada tras poner en valor el Pacto de Migración y Asilo alcanzado por los ministros de Interior.

En uno de sus últimos borradores en los que han trabajado las delegación de los Veintisiete, la Declaración de Granada endurecía su lenguaje en migración para tratar de contentar a la Italia de Giorgia Meloni, como había sucedido con el preacuerdo en el pacto de Migración y Asilo esta misma semana. El artículo que finalmente no ha sido agregado establecía que “la migración irregular debe abordarse inmediatamente de manera decidida”.

“No permitiremos que los traficantes decidan quién entra en la UE. Seguiremos aplicando eficaz y rápidamente todas nuestras decisiones”, esbozaba el texto, que citaba una serie de políticas para contener la inmigración, entre ellas, las polémicas asociaciones con los países de origen y tránsito o la “lucha decidida contra la delincuencia organizada”. El artículo encomendaba al club comunitario la misión de evitar “instrumentalización de la migración como amenaza híbrida”, una referencia velada a la crisis migratoria en la frontera entre Bielorrusia y Polonia en 2021 y 2022.

Polonia y Hungría, "violadas" por Bruselas

Las críticas feroces de Polonia y Hungría han terminado arruinando cualquier intento de añadir ese artículo. “Bruselas violó legalmente a Polonia y Hungría al forzar la aprobación del Pacto Migratorio. Así que no habrá compromiso en materia de migración. Ni hoy ni en los próximos años. Defenderemos nuestras fronteras de los migrantes y también de los burócratas de Bruselas”, ha declarado este viernes el primer ministro húngaro, Viktor Orbán, a través de su cuenta en X, anteriormente conocida como Twitter.

“Después de esto, no hay ninguna posibilidad de llegar a ningún tipo de compromiso y acuerdo sobre migración… porque legalmente hemos sido violados. Si te violan, legalmente, te obligan a aceptar algo que no te gusta, ¿cómo te gustaría llegar a un compromiso y a un acuerdo? Es imposible”, ha insistido en declaraciones posteriores.

Su homólogo polaco, Mateusz Morawiecki, afirmó también que se opone "rotundamente" al acuerdo cerrado para el reparto de migrantes en momentos de crisis, que juzga como un "dictado" de la Comisión Europea y Alemania. "No hay posibilidad de distribuir a los inmigrantes ilegales sin el consentimiento de cada Estado miembro", agregó el polaco que se enfrenta a unas elecciones parlamentarias el próximo 15 de octubre. "Polonia pone un fuerte veto a tal posición", agregó. Morawiecki ha presentado en Granada su propio plan de cinco puntos, entre los que figuran, "una protección muy fuerte de las fronteras exteriores, luchar decididamente contra los traficantes de personas así como recortar las prestaciones sociales a los inmigrantes ilegales"

Varsovia y Budapest insisten en que debería exigirse la unanimidad en la reforma del pacto migratorio aunque, según la legislación europea, se decide por mayoría cualificada. Precisamente la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, y el canciller alemán, Olaf Scholz, han mantenido este viernes una reunión bilateral en Granada tras los desencuentros en la negociación del pacto migratorio.

Para lograr la luz verde de Roma, la última versión del texto del Pacto de Migración eliminó una referencia a las misiones de rescate a cargo de organizaciones no gubernamentales, una demanda de Berlín. Su eliminación fue una concesión para lograr el respaldo de Roma, que también logró endurecer el lenguaje sobre las ONG en el resto del documento. Meloni insistió este jueves desde Granada que la propuesta italiana pasa por “detener los flujos ilegales”, ya que considera que “es la única manera de que todos estén de acuerdo en la UE”. Se mostró reacia a que el debate gire en torno a “redistribuir” a los migrantes entre los Veintisiete.