Marruecos ha derrotado por amplia mayoría a Sudáfrica en su apuesta por presidir este año el Consejo de Derechos Humanos de la ONU en mitad de las críticas saharauis y sudafricanas por las continuas violaciones de derechos humanos en los territorios ocupados del Sáhara Occidental, la ex colonia española ocupada por Rabat desde 1975.

En la votación de este miércoles, 30 de los 47 países miembro del Consejo de Derechos Humanos de la ONU han optado por la candidatura marroquí en una semana marcada precisamente por la iniciativa presentada ante la Corte Penal Internacional por Sudáfrica que acusa a Israel de cometer un genocidio en Gaza y cuyas audiencias arrancan este jueves en La Haya.

Fuentes saharauis atribuyen el resultado final a "una decisión geopolítica" vinculada a la posición de liderazgo de Sudáfrica frente a la operación militar israelí en Gaza, que le ha terminado penalizando por lo que consideran las presiones occidentales sobre los países miembro. Marruecos es un valedor de Israel, país con el que ha estrechado lazos en los últimos. El temor es que ahora la presidencia pueda aplazar ciertos asuntos en la agenda internacional de derechos humanos.

Marruecos "destroza" la legitimidad del consejo

Tanto Sudáfrica como los saharauis habían acusado a Rabat de cometer graves violaciones de los derechos humanos en el Sáhara Occidental, el último territorio por descolonizar en África. Para ambos, Marruecos carecía de credibilidad para dirigir una institución cuya presidencia anual recae este año en el continente africano.

En declaraciones a Reuters, la embajadora de Sudáfrica en Ginebra, Mxolisi Nkosi, declaró previamente que Marruecos era la "antítesis de lo que representa el Consejo". "Que un país con todos estos retos aspire a ser la cara del Consejo de Derechos Humanos y, Dios no lo quiera si sale elegido, esto destrozará cualquier atisbo de legitimidad que este consejo haya tenido alguna vez".

Por segunda vez en los 17 años de historia del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, había quedado sin presidente a principios de año y ha tenido que ser elegido en votación secreta este miércoles. La diplomacia de la dictadura alauí ha celebrado la designación como "un reconocimiento por la comunidad internacional a la visión clarividente de su majestad el rey Mohamed VI", un monarca ausente de los asuntos diarios del reino que pasa largas temporadas en el extranjero.

"La elección del reino, gracias a la adhesión de un gran número de países de todas las regiones del mundo, y a pesar de la movilización de Argelia y Sudáfrica para contrarrestarla, es igualmente indicativa de la confianza y credibilidad que inspira la acción exterior de Marruecos bajo el impulso real", señala el ministerio de Asuntos Exteriores marroquí en un comunicado.

El Consejo, cuya presidencia es simbólica y sirve para la promoción personal de los embajadores elegidos, se reúne varias veces al año en Ginebra. Es el único organismo mundial intergubernamental que protege los derechos humanos en todo el mundo y puede incrementar el escrutinio de los historiales de derechos humanos de los países así como autorizar investigaciones.