Los líderes de las principales agencias humanitarias de la ONU han reclamado a más de una decena de países que reanuden la financiación a la agencia del organismo para Palestina (UNRWA), en plena ofensiva de la diplomacia israelí para disolver el organismo de la ONU.

"El mundo no puede abandonar a Gaza", suplica una misiva firmada por más de una docena de cabezas de distintas agencias de la ONU, entre ellos el alto comisionado de la agencia para los refugiados (ACNUR), Filippo Grandi, y el director de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom.

"Las acusaciones de participación de varios funcionarios de la UNRWA (Agencia de Naciones Unidas para la población refugiada de Palestina en Oriente Próximo) en los atroces ataques contra Israel el pasado 7 de octubre son espeluznantes. Como ha dicho el Secretario General de la ONU, cualquier empleado de Naciones Unidas implicado en actos de terrorismo deberá rendir cuentas. Sin embargo, no debemos impedir que toda una organización cumpla su mandato de servir a las personas que lo necesitan desesperadamente", señala la carta.

Colapso humanitario

Más de 15 países, entre ellos los principales donantes de UNRWA como EE.UU., Reino Unido y Alemania, suspendieron la semana pasada la financiación a la agencia después de que se conociera la presunta implicación de algunos de sus miembros en los ataques contra Israel del 7 de octubre.

Los líderes explicaron en la carta que dejar a UNRWA sin financiación "provocaría el colapso del sistema humanitario en Gaza". "La UNRWA ha anunciado una revisión completa e independiente de la organización y se ha activado la Oficina de Servicios de Supervisión Interna de la ONU. La retirada de fondos de la UNRWA es peligrosa y derivaría en el colapso del sistema humanitario en Gaza, con consecuencias humanitarias y de Derechos Humanos de gran alcance en el territorio palestino ocupado y en toda la región. El mundo no puede abandonar al pueblo de Gaza", concluye la misiva.

El secretario general de la ONU, António Guterres, se reunió hoy en Nueva York con 35 estados miembros más la Unión Europea para tratar de garantizar la continuidad del trabajo de la UNRWA, del que dependen millones de palestinos.

La embajadora de EE.UU. ante la ONU, Linda Thomas-Greenfield, dijo este martes que su país no descarta reanudar su financiación a la agencia, pero que se necesitan "cambios fundamentales" a su funcionamiento. La UNRWA ya ha rescindido los contratos de todos los presuntos implicados en el ataque contra Israel y ha abierto una investigación, según anunció la entidad.

La agencia trabaja para brindar apoyo, protección y cubrir las necesidades más básicas de unos 5,6 millones de refugiados palestinos registrados en Jordania, el Líbano, Siria, Cisjordania y la Franja de Gaza.