La crisis catalana se dirige hacia una nueva dimensión. Este jueves, la negativa del presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, a convocar elecciones, después de una jornada plagada de rumores y movimientos confusos, parece no dejar otro camino posible que la intervención de la autonomía de Cataluña por parte del Gobierno español, a través de la aplicación del artículo 155 de la Constitución.

Esta extraordinaria medida genera cierta controversia. Y no sólo a nivel político, sino también entre los inversores. Varias firmas de análisis y agencias de calificación han expresado en las últimas semanas sus temores a que el uso de esta herramienta por parte del Ejecutivo que preside Mariano Rajoy podría elevar las tensiones en Cataluña. "Si bien se aseguraría que Cataluña siga siendo parte de España a corto plazo, su uso también aumentaría la incertidumbre sobre cómo evoluciona el callejón sin salida en un horizonte de tiempo más largo", señalaba recientemente Moody's.

Sin embargo, a medida que se acerca el momento crucial de la intervención de la autonomía catalana, se acrecientan las voces en los mercados que respaldan la aplicación del artículo 155. Uno de los más claros a este respecto ha sido el banco danés Saxo Bank. Según, Christopher Dembik, responsable de análisis macroeconómico de la entidad, "la activación del artículo 155 es claramente la mejor manera de enviar una señal positiva a los inversores y empresas extranjeras con sede en Cataluña".

Saxo Bank ha sido una de las pocas entidades que ha defendido de forma clara la viabilidad económica de una Cataluña independiente, aunque siempre bajo la condición de que permaneciera en el marco de la Unión Europea. Sin embargo, Dembik parece desencantado con la actuación de los líderes políticos catalanes en las últimas semanas. "La lenta degradación de la situación política, que ha empujado a muchas empresas a salir, obviamente conducirá a un menor crecimiento del PIB, a una menor entrada de IED (inversión extranjera directa) y, en última instancia, a un aumento de las cifras de desempleo", advierte.

En este sentido, el analista de la firma danesa considera que "el problema para Cataluña es que la Generalitat parece no tener ningún plan económico y financiero en caso de independizarse de España. ¿Una Cataluña independiente tendrá su propio banco central que emite euros u otra moneda?, ¿cómo puede el gobierno tranquilizar a las empresas con sede en Cataluña sobre que todavía tendrán acceso al mercado común europeo?". Por esa razón, "creo firmemente que la Generalitat no estaba preparada para enfrentar la independencia, al menos en términos económicos", observa Dembik.

Saxo Bank considera que la Generalitat no tiene ningún plan económico para la independencia

En la misma línea, un analista de la firma de inversión Alantra Equities respalda que el Gobierno central tome el control de las competencias de la Generalitat. "Creemos que el Gobierno debería proceder a aplicar el artículo 155, porque le permitiría frenar la máquina propagandística del gobierno catalán y retrasar las elecciones hasta 2018 dañaría a la facción pro independentista y restauraría el orden constitucional en Cataluña", señala un analista de Alantra Equities.

El bróker, en una nota remitida a sus clientes institucionales, la mayor parte extranjeros, señala que "activar el 155 podría generar más tensiones y deterioro económico a corto plazo, pero es la mejor opción a largo plazo".

Añade que, desde su punto de vista, aunque se celebrasen unas elecciones anticipadas en Cataluña, los partidos independentistas no lograrían la mayoría, ya que "los partidos independentistas están perdiendo votos, dado que en las últimas semanas están siendo más aparentes sus contradicciones" y por las "movilizaciones de la mayoría silenciosa" en favor de la unidad.

En este escenario, el analista de Alantra recomienda "prudencia" y advierte de que "la incertidumbre es elevada, la visibilidad permanece extremadamente baja y es probable de que el deterioro de la economía sea material". De hecho, la firma ha advertido recientemente de que el impacto económico de la crisis está siendo mayor de lo previsto y podría prolongarse durante años.