Los desplazamientos por el territorio nacional realizados por los 350 diputados desde comienzos de año hasta el pasado 30 de septiembre ocasionaron un gasto al Congreso de 2,71 millones de euros, cifra que corresponde a las cantidades pagadas para ir y volver a sus circunscripciones y también en sus viajes de partido, que también abona la institución.

Según el último balance publicado en el Portal de la Transparencia del Congreso, los viajes de los diputados desde el 1 de julio al 30 de septiembre por territorio nacional ascendieron a los 702.727 euros.

Es una cantidad inferior al anterior trimestre -de abril a junio- en el que se abonaron facturas por 1,01 millones de euros, aunque hay que tener en cuenta que en agosto no hubo actividad parlamentaria ordinaria. De enero a abril, el gasto se elevó a los 999.791 euros, lo que suma esos 2,71 millones de euros desde principios de año.

En los nueve primeros meses del año, las facturas por desplazamientos para ir o volver a Madrid para asistir a plenos o comisiones ascendieron a 2,46 millones de euros, mientras que los viajes de carácter político o de partido, supusieron unos gastos de 246.023 euros.

Hay un tercer apartado, el de viajes con delegaciones oficiales del Congreso por territorio nacional, que alcanzaron apenas 1.793 euros. No obstante, si se suman también los gastos de gestión, de cancelaciones y de cambios, así como los billetes emitidos pendientes de utilización, el Congreso ha gastado 3,39 millones de euros en los primeros nueve meses del año.