César Zafra es el número dos de Ciudadanos en la Comunidad de Madrid y el portavoz en la comisión de Corrupción. En ella consiguió sacar de quicio a Cristina Cifuentes en un interrogatorio sobre la adjudicación de la cafetería de la Asamblea de Madrid. Ese día fue un antes y un después en la relación entre ambos partidos. Pese a ello, el acuerdo de investidura avanza y con él la legislatura. "Se ha cumplido el 54% de las medidas y el 38% están en desarrollo".

Satisfechos con el grado de cumplimiento conseguido hasta ahora, reconoce estar decepcionado con las dificultades para sacar las medidas de regeneración, la seña de identidad de Ciudadanos, por culpa de los dos grandes partidos: "Cuando firmas algo con el PP das por hecho que lo van a cumplir", afirma. A estas alturas se siente engañado y, pese a que no pierde la fe, si algo ha aprendido en estos tres años de oposición es que "parte de la nueva política es perder esa inocencia y darse cuenta de que tanto el PP como el PSOE te van a mentir".

Pregunta.- La próxima semana Alberto Ruiz-Gallardón declarará en la comisión de investigación sobre el Canal de Isabel II. ¿Qué espera de su intervención?

Respuesta.- Creo que lo más interesante que puede decirnos el señor Gallardón es de quién fue la idea principal. Que nos diga de quién fue la decisión y si cuando empezó todo -que entonces él estaba de presidente- vio que 76 millones de dólares pasaron de Madrid a Panamá. Que igual ese circuito estaba bien hecho, pero es dinero público que acaba en Panamá... Uno de los problemas que tenemos cuando preguntamos a quién se compró esa empresa y quién se llevó ese dinero es que nadie nos dice quién es. Y es Panamá. Y tienes una sensación de que se ha usado el dinero público…

P.- ¿Es optimista?

R.- Todos los presidentes que han pasado por aquí han hablado. Incluso el señor González, que vino dos veces y estaba ya en una situación complicada. Y yo creo que el señor Gallardón también hablará porque al ser presidente tiene un componente de responsabilidad muy alto para tomar decisiones. Después se sentía muy orgulloso de tomas esas decisiones y las vendía a todo el mundo. Y si un presidente de una comunidad llega a una comisión de investigación y no dice nada es muy significativo.

P.- ¿Cómo valora los últimos informes de la UCO que vinculan a Cifuentes en la Púnica en relación al contrato de la cafetería de la Asamblea de Madrid?

En el PP se han hecho muchas cosas a dedo y de forma muy poco transparente"

R.- El tema de la cafetería es bastante complejo, porque son pequeños detalles que cuando se miran con detenimiento ves que hay cosas que no tienen mucho sentido. Por ejemplo, una de las cosas que nos sorprendió es que cuando llamamos a la letrada Recorder, que todo el mundo la señalaba a ella, decidió no hablar. Ahora ha tenido que hablar delante de un juez y ha dicho que todo se hizo bien, pero te choca mucho que una letrada de la Comunidad de Madrid venga a una comisión de investigación y decida no hablar. En el PP se han hecho cosas como se hacían: a dedo y de forma muy poco transparente y la señora Cifuentes lleva mucho tiempo en política, ha estado en la Comunidad de Madrid toda la vida y ha estado al lado del señor Granados, de la señora Aguirre, del señor González… Nadie se sorprende de la forma de actuar en aquel momento. Nadie levantó la voz y yo creo que era muy obvio. Estos informes dejan ver que la señora Cifuentes era parte de ese engranaje de la Comunidad de Madrid, no es alguien que haya caído del cielo.

P.- Usted es el portavoz de la comisión de Corrupción en la Asamblea, ¿qué validez tienen las comisiones si al final nadie habla?

R.- Mucha gente se ha amparado en su poder para no dar explicaciones. Yo creo que a largo plazo va a ser muy útil. Ya ha habido varios requerimientos por parte de un juez en los que nos han pedido las grabaciones de las comisiones. Simplemente porque valgan en algún caso dos o tres comparecencias merece la pena. Yo no sé si todo llegará a un juez, pero demuestra a la gente que el tiempo de “hago cualquier cosa y no pasa nada” tiene que terminar. Aunque sea por un mero punto de orgullo, interrogar a personas que durante años se han reído de muchos madrileños tiene un punto de necesario.

P.- Fue muy llamativa una de sus intervenciones en la comisión sobre las adjudicaciones de la cafetería de la Asamblea de Madrid. Tuvo un interrogatorio muy duro contra Cifuentes en un momento en el que había bastante calma entre Ciudadanos y PP a nivel nacional. ¿Se enfriaron entonces las relaciones con la presidenta de la Comunidad?

R.- No diría que se han enfriado. Ellos, al principio de la legislatura, pensaban que íbamos a ser una especie de socios, que íbamos a decir que sí a todo y con el paso del tiempo -a lo mejor ese fue el momento cilmen de la situación- se dieron cuenta de que no. Si vemos que algo es raro vamos a preguntarlo; y si hay que ser incisivos lo vamos a ser; y si tenemos que ser duros lo vamos a ser. Porque esa es la comparación: ellos no fueron duros con los suyos. Muchas veces por desgracia hicieron la vista gorda y, quieras que no, yo me levanté en un pleno para votar a favor de la investidura de Cifuentes y de alguna forma me hago responsable de ello. Y si yo como responsable no soy el primero que cuando ve algo raro pregunta, de forma más o menos dura... Si la relación desde entonces es un poco peor pues bueno, no lo sé, pero no hemos venido a hacer amigos. Hemos tenido siempre buena relación con todos los partidos pero es verdad que en ese punto ellos sintieron que se habían herido ciertas sensibilidades, y es el trabajo que hay que hacer.

P.- La presidenta regional ha reiterado en numerosas ocasiones que Ciudadanos vota por lo general cualquier propuesta de PSOE y Podemos en lugar de con el PP. ¿Qué opina al respecto?

El PP nunca propone cosas aquí en la Comunidad de Madrid. En tres años igual ha podido llevar cuatro o cinco PNL"

R.- Bueno es que el PP nunca propone cosas aquí. En tres años igual ha podido llevar cuatro o cinco PNL. Yo voto con quien quiera. Hay cosas que votaré con el PP y cosas que votaré con Podemos. Fijarse en la estadística unas veces está bien, pero a veces no tiene mucho sentido si no sabes lo que se está proponiendo, porque al final no creo que sea ni bueno ni malo votar con uno o con otro. Lo importante es qué estás votando. Hay cosas que puede proponer el PP que pueden estar muy bien y cosas que propone Podemos que pueden estar muy bien. No suele ser así pero en algunos casos puede ser. El problema que tiene el PP es que tenían la sensación de que como habíamos dado el sí a la investidura de Cristina Cifuentes, a partir de ahí tiene que ser todo que sí. Yo voy a defender lo que me ha traído hasta aquí. Es un buen eslogan el de "lo votáis todo con la izquierda". En el otro lado me dicen: "sois la muleta del PP". Cuando me dejen de decir eso es cuando tendremos un problema, porque si yo quiero ser un partido de centro tengo que enfadar a los dos extremos. El día que deje de hacerlo igual dejo de ser el partido de centro y sí que estoy escorado.

Las medidas de regeneración se resisten

P.- ¿Cuál es el grado de cumplimiento a día de hoy del pacto de investidura? ¿Qué porcentaje de medidas se han cumplido ya?

R.- Más de la mitad están cumplidas, el 54%, y cerca de un 38% en desarrollo. El resto sin cumplir. Son muy pocas medidas pero son las de regeneración, que son las que más está costando porque el PP presenta una ley y piensa que con ello ya está cumplido. Y no. Hasta que no esté aprobada la ley no está cumplido. Pasa con los aforamientos. Ellos han presentado una ley y creen que ya está. El día que se apruebe será cuando esté cumplido. Pero está muy avanzado.

P.- ¿Están conformes?

R.- Sí, estamos conformes. Nos da un poco de pena que estamos en el tercer año y algunas reformas como la limitación de mandatos y los aforamientos es un suplicio sacarlos adelante, pero tanto por el PP como por el PSOE.

P.- ¿Pero saldrán?

R.- No puedo perder la fe, soy una persona positiva.

P.- Eso suena a que no se cumplirán.

R.- Es que estamos en el tercer año y da la sensación muchas veces de que es lo de siempre. Ellos te dicen: “Hay que hacer una reforma global”. Y al principio te lo puedes creer, pero cuando pasa un cierto tiempo te das cuenta de que es la excusa para no hacerlo. "Reformamos toda la casa menos lo que necesitamos reformar". Y estamos en el tercer año y te encuentras en situaciones que dices: pero bueno, ¿esto cuándo lo hacemos?

P.- Entonces, si son las medidas de regeneración las prioritarias para Ciudadanos y finalmente no consiguen que salgan, ¿será un fracaso?

Mi reflexión es que, aunque tengas la capacidad para cambiar cosas, no te puedes fiar siempre de las buenas palabras"

R.- Es un poco decepción en cierto sentido, porque una vez lo firmas con el PP das por hecho que todo el mundo va a apoyarlo. Estamos hablando de aforamientos y das por hecho que todo el mundo te va a decir que sí, pero cuando llega el momento en que lo presentas, te dicen que no. Presentamos aquí una medida que era para que los alcaldes no pudiesen ser diputados porque te choca cuando ves aquí alcaldes de grandes ciudades compaginando el trabajo con el de diputado. La presentamos y todo el mundo votó en contra menos Podemos, porque quedaba bonito. Cuando preguntas por qué, te dicen que hay que hacer una reforma global, y al final no se hace ninguna reforma.

P.- ¿Y qué reflexión hacen sobre ello? ¿No volver a pactar con el PP?

R.- Primero, no hay que perder la esperanza, que todavía queda tiempo y alguna de ellas yo creo que sí saldrá. La reflexión que hacemos, o que hago yo a título personal, es que muchas veces, aunque tengas la capacidad para cambiar cosas como tenemos nosotros, que somos la llave de Gobierno, no te puedes fiar siempre de las buenas palabras. En campaña todo el mundo dice cosas que son muy bonitas y cuando llegas aquí te encuentras con todas las dificultades del mundo. Igual hemos dado por hecho de que era muy fácil convencer a todo el mundo de que había que quitar los aforamientos, porque nos parece tan lógico y tan normal y se lo has escuchado a todos decirlo que das por hecho que no te están mintiendo y a lo mejor una parte de la nueva política es perder esa inocencia y darse cuenta de que tanto el PP como el PSOE te van a mentir.

P.- ¿Os sentís engañados?

R.- A veces sí. Yo sí. Muchas veces. Hemos venido con mucha ilusión y la seguimos teniendo, pero en ese sentido, tanto el PSOE como el PP tienen esa capacidad para venderte una moto que cuando llega el momento dices: ¿pero esto qué es?

P.- ¿Se siente engañado por Cristina Cifuentes, que al final es quien firmó ese acuerdo?

R.- Esa evaluación la haré el último día de legislatura. Hasta entonces no puedo perder la esperanza. Vamos a conseguirlo, somos muy cabezotas y hemos conseguido cosas que poniéndonos en perspectiva nunca pensé que conseguiríamos.

P.- Las elecciones autonómicas todavía quedan lejos, pero con la experiencia de estos dos años en la Asamblea de Madrid ¿Cómo ve a Ciudadanos en las urnas?

R.- La mejor opción que tomamos fue no entrar en los gobiernos porque el trabajo que queríamos hacer requiere de un gran aprendizaje y creo que estos años han servido para que los equipos, tanto en la Comunidad de Madrid como en los ayuntamientos, cojan mucha experiencia. Estar en la oposición te permite ver los fallos de la administración y cosas que hasta que no estás en el sitio no te das cuenta. Eso te permite entrar en gobiernos y creo que lo vamos a hacer bien.

P.- ¿Ve a Ignacio Aguado presidente de la Comunidad?

Tanto el PSOE como el PP tienen la capacidad para venderte la moto

R.- Siembre lo he visto. Si no no estaría aquí. Además, Ignacio tiene algo que muy pocos candidatos tienen: que es muy buena persona y que piensa en la comunidad por encima de todo. No es una persona que venga a buscar un puesto para la siguiente legislatura. A él le gusta esto. Él quiere estar aquí, y eso es una gran diferencia porque muchos cuando vienen aquí te da la sensación de que están de paso para ir a otro sitio. Y la Comunidad de Madrid no puede ser un punto de paso.

P.- La semana pasada su grupo cometió un gran error al presentar las enmiendas a los presupuestos 23 minutos tarde. ¿Cómo se ha tomado dentro del partido teniendo que es uno de los trabajos más importantes de Ciudadanos?

R.- Como una anécdota. Son cosas que pasan, lo que pasa que se magnifica todo porque, yo lo entiendo, el titular es impactante: 23 minutos tarde. Pero bueno, al final cuentas lo que ha pasado y tampoco hay mucha más historia, son cosas de administración que a veces fallan y tampoco le dimos mayor importancia.

P.- ¿Qué les dijeron en el partido?

R.- Nada, nos preguntaron qué había pasado, igual que habríamos preguntado nosotros. Les contamos cómo fue la situación y ya está. Cuando pasan estas cosas parece que siempre tiene que haber un culpable. Fue una serie de catastróficas desdichas pero al final no hay que buscar culpables. Todo el mundo puede tener un error. O incluso todos a la vez pueden tener un error (se ríe).

P.- ¿Qué habría supuesto para el partido que no fueran admitidas las enmiendas?

R.- Lo bueno que tenemos es que tenemos la capacidad de hablar con todos los grupos, y estoy seguro de que podríamos transaccionar con otros partidos de modo que nos permitiera sacar nuestras propuestas adelante. Se hubiese conseguido de alguna otra forma.

Elecciones en Cataluña

P.- El CIS de esta semana ya da a Ciudadanos como una alternativa real de gobierno en Cataluña, empatando con ERC, ¿qué expectativas tiene para el 21-D?

R.- Para empezar, no me fío de ninguna encuesta. Nunca lo he hecho, ni de la que nos daban como ganadores ni de las que decían que no íbamos a sacar nada. Sí que es cierto que el CIS es otra encuesta más que viene a ratificar la sensación generalizada que hay: que podemos ganar en Cataluña. Es una grandísima noticia y dice mucho de todos los compañeros que han estado ahí durante muchos años. Es el ejemplo de la constancia en política. El primer año entras con 3 diputados, luego con 9, el siguiente con 25 y el siguiente ganas. Eso es Ciudadanos, nosotros no hemos venido, como decía Pablo Iglesias, a asaltar los cielos. Hemos venido a reconstruirlo y eso requiere mucho tiempo de trabajo y ser mucho más pacientes.

P.- ¿Qué pronóstico hace?

R.- Yo creo que vamos a ganar. Tengo la corazonada de que vamos a ganar, de verdad. Yo soy siempre muy prudente, pero tengo la corazonada.

P.- ¿Ya ve a Arrimadas presidenta?

Nosotros no hemos venido, como decía Pablo Iglesias, a asaltar los cielos

R.- Sí, sí, completamente. Si me preguntas en otro sitio intentaría ser más cauto pero en esta ocasión estoy seguro. Tiene que ser la presidenta porque, si no, ¿quién lo va a ser? ¿Alguien exiliado? ¿Alguien que está en la cárcel? ¿El señor Iceta que no sabe si sí, si no, si bueno o si malo? ¿En comú-podem que tampoco tiene muy claro lo que quiere hacer? Hay gente de otros partidos que nos ha dicho que si estuvieran allí votarían a Inés.

P.- ¿Los resultados en Cataluña pueden tener un efecto contagio en la Comunidad de Madrid de cara a las próximas elecciones?

R.- Son escenarios distintos pero sí que creo que la Comunidad de Madrid es un escenario muy propicio para Ciudadanos, tanto por el tipo de votante que tenemos aquí, como por el trabajo que estamos haciendo y la situación. En Cataluña entraron con tres diputados y nosotros con 17. Eran momentos de la política muy diferentes pero creo que Madrid en una comunidad muy naranja, muy de Ciudadanos. Recuerdo entrevistas donde nos decían: no vais a ganar nunca, estáis destinados a ser una partido bisagra. Bueno, yo he visto al PP en la oposición desde que era pequeño. Me acuerdo de que Felipe González siempre ganaba elecciones. Hasta que un día dejó de ganarlas. Y a nosotros tarde o temprano creo que nos pasará lo mismo.