Política

Desafío separatista de Cataluña

La Sala del 61 estudiará el miércoles las recusaciones de los jueces del 'procés'

El Tribunal Supremo prevé resolver este mismo miércoles los incidentes de recusación planteados por los líderes independentistas contra toda la Sala que debe juzgar el 'procés'

La Sala del 61 estudiará el miércoles las recusaciones de los jueces del 'procés'
El magistrado Manuel Marchena | EFE

La Sala del 61 se reunirá el próximo miércoles para estudiar las recusaciones promovidas por los líderes independentistas contra los miembros de la Sala de Enjuiciamiento del ‘procés, entre ellos el presidente y ponente Manuel Marchena. Según informan fuentes jurídicas a El Independiente, la Sala que preside el magistrado Carlos Lesmes analizará junto con los magistrados más antiguos y más nuevos de cada una de las cinco Salas del Alto Tribunal los incidentes de recusación promovidos por los procesados por rebelión como el ex vicepresidente del Govern, Oriol Junqueras, o el ex líder de ANC, Jordi Sánchez, entre otros.

Tal y como adelantó este periódico, Marchena, al que se recusó después de que salieran a la luz pública los whatsapps del senador del Partido Popular Ignacio Cosidó sobre el “control” en la Sala Segunda,  y el resto de miembros del tribunal rechazaron apartarse de forma voluntaria del procedimiento, dejando en manos de la Sala del 61 el órgano la última decisión sobre esta cuestión.

Es la segunda ocasión en que los investigados intentar alterar la composición de todo el tribunal. La primera de ellas el pasado mes de agosto cuando sin éxito recusaron, junto al presidente de la Sala, a los jueces Andrés Martínez Arrieta, Antonio del Moral, Juan Ramón Berdugo y Luciano Varela. Ahora, también tratan de recusar a los togados Ana Ferrer y Andrés Palomo, también integrantes del tribunal que debe juzgar en los próximos meses el desafío independentista en Cataluña.

Por su parte, la Fiscalía del Alto Tribunal ha pedido que se rechacen las citadas recusaciones. Sobre la recusación de Marchena a raíz de los mensajes de móvil de Cosido el Ministerio Público ha defendido que “la denuncia de parcialidad de Marchena es inasumible en tanto no viene referida a ninguna acción, expresión o pronunciamiento del mismo en el ámbito público de sus funciones, ni en privado de su vida personal, que le aleje de la absoluta imparcialidad y ajenidad respecto del objeto del proceso y las personas que en el mismo están afectadas o de algún modo intervienen”.

Respecto al resto de recusaciones formuladas contra los otros miembros del tribunal, donde se apela a la nueva doctrina de Estrasburgo con el ex líder de Batasuna Arnaldo Otegi, la Fiscalía concluye que “presumir que los seis magistrados recusados (todos menos Marchena) son parciales por mera ósmosis y por extensión no solo es contrario a la presunción de imparcialidad del juzgador (…) sino que carece de fundamento absoluto”.

Fuentes jurídicas consultadas explican que es altamente probable que las nuevas recusaciones sean rechazadas por la Sala del 61 al no apreciarse causas objetivas de falta de imparcialidad entre los miembros del tribunal.

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