Iglesias reconoce que Sánchez no le ha llamado para formar Gobierno

"No ha habido ningún contacto con Pedro Sánchez desde hace dos semanas". Así lo ha comunicado el líder de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, durante la atención a los medios posterior a la ronda de contactos que ha mantenido este jueves con Felipe VI en el Palacio de la Zarzuela.

En medio de la tormenta interna que afronta su partido en los últimos días, Iglesias ha evitado en la medida de lo posible hacer declaraciones al respecto, centrándose "en lo que tenemos ahora entre manos" en referencia a buscar por todos los medios entrar en Moncloa de la mano de Pedro Sánchez.

El candidato 'morado' ha admitido no saber por qué no han comenzado unos contactos que "le corresponde a Sánchez iniciar", aunque admite que el PSOE mira a otro lado porque prefiere "buscar el apoyo de Ciudadanos", un apoyo que "no está encontrando porque Rivera apuesta por un camino diferente".

La única vía que ha puesto Pablo Iglesias encima de la mesa con el Rey presente es la de promover una "alianza" con Podemos. "Un gobierno de coalición sería lo mejor para España, y la única garantía de que haya medidas progresistas", ha justificado, lanzando un dardo velado a las intenciones del Ejecutivo de tender puentes a un partido virado a la derecha.

Preguntado por la posibilidad de precipitar un Ejecutivo monocolor -la opción preferida en Ferraz- a cambio de que Sánchez aceptase una serie de medidas programáticas de Podemos, Iglesias ha tirado por la borda directamente esa posibilidad porque "hemos vivido por experiencia propia que no existe ningún mecanismo de control efectivo de los acuerdos programáticos" y que "la única manera de establecer un control de los acuerdos es entrando en el Consejo de Ministros". Iglesias no ha conseguido que Sánchez llegue a una investidura "sin tener cerrados los apoyos", y rechaza de lleno la premisa de dejar que gobierne la lista más votada porque a un debate parlamentario de ese calado se llega "con los deberes hechos".

Con Felipe VI, asegura, ha mantenido "una reunión cordial", en una cita que Iglesias ha aprovechado para transmitir los "ejes de un Gobierno progresista" que comenzará "cuando Sánchez tenga a bien iniciar una ronda de contactos con nosotros". Así, entre las medidas clave que tantearán con los socialistas destacan la de subir "aún más" el salario mínimo a los 1.200 euros; la reducción de la jornada laboral a 34 horas semanales; o poner en marcha "inversiones estratégicas" contra la "desaceleración económica" que puede sufrir España en media de la guerra comercial "iniciada por Donald Trump", poniendo además de relieve medidas en materia de reducción fiscal o proyectos "verdes".

Defiende la "rotación" en el caso Echenique

Aunque ha evitado referirse a la rebelión abierta en Podemos que se ha saldado con la cabeza de Pablo Echenique, Iglesias ha defendido la "rotación" en la Organización de Podemos y ha recalcado que el diputado por Zaragoza será una "persona crucial" en las negociaciones para entrar en el Palacio de la Moncloa.

Alegando que comparecía ante la prensa únicamente para dar cuenta de su reunión con el Rey, se ha limitado a señalar que es "sensato" y "bueno" que se produzca una "cierta rotación" en los cargos, justificando la decisión en que "como sabrán el resto de partidos" el puesto de "secretario de Organización es asumir la responsabilidad más difícil y gravosa", evitando en todo momento hablar sobre la vinculación manifiesta entre la salida de Echenique y su sustitución por Alberto Rodríguez con la debacle electoral de Podemos en las generales, europeas, municipales y autonómicas.

Sobre el Consejo Ciudadanos que determinará este sábado el futuro de Pablo Echenique en el partido, Iglesias ha evitado especificar si el ya ex número tres podría acabar formando parte de un hipotético bipartito con el PSOE porque "de los nombres es de lo último de lo que hay que hablar" aunque sí ha adelantado que su papel "será crucial" en la consecución de una ansiada coalición con Pedro Sánchez.