El ex presidente del Gobierno Mariano Rajoy se estrenará en campaña este sábado en la localidad de Antequera en apoyo de los populares malagueños. En principio el cabeza de lista por esta cricunscripción, el peirodista Pablo Montesinos, tiene acto en Albacete. Rajoy tendrá un papel más activo que en las elecciones del pasado 28-A, donde se dejó ver, y muy poco, con su amiga Ana Pastor, que entonces encabezó Pontevedra y hoy va de dos por Madrid, en lo que ha supuesto un cierto reconocimiento del "marianismo".

De hecho, el ex jefe del Ejecutivo volverá a respaldar a Pastor en algunos de sus mítines, que la llevarán por toda España. Sin embargo, fuentes próximas a la ex ministra y presidenta del Congreso indican que el calendario aún no está cerrado y eso que la campaña arranca mañana a las 12 de la noche con una pegada de carteles de Pablo Casado en Sevilla.

Rajoy ha tenido una presencia muy controlada en actos del PP

A Rajoy y a Montesinos les une la historia común en la que uno, en calidad de jefe del Ejecutivo, y el otro, de periodista, afrontaban preguntas y respuestas muchas veces nada complacientes. De ahí ha surgido una buena relación, hasta el punto de preferir Rajoy -"si nada cambia", dicen en Génova- ir a Antequera en lugar de a Lalín (Pontevedra) donde estará el sábado el líder del PP junto al presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo.

Rajoy ha tenido hasta ahora una presencia muy controlada en las campañas electorales desde que Pablo Casado aterrizó en la presidencia del PP, aunque ambos mantienen un trato fluido y cordial que se traduce en algunos encuentros para almorzar. Casado le suele consultar cuestiones referidas a la política europea sobre todo en la medida en que el partido haya asumido compromisos con sus socios del PPE.

Sin embargo, Rajoy fiel a su deseo de no interferir en la vida de la nueva dirección popular, además de respaldar a Pastor también acudió en apoyo del vasco Alfonso Alfonso en las municipales de mayo y a Sevilla para la toma de posesión del presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno. Y poco más. El deseo de Génova es que el foco no se ponga ni en Rajoy ni en su antecesor, José María Aznar, cuya presencia en la del 28-A se consideró contraproducente. De hecho, cuando se pregunta al equipo de campaña sobre el grado de implicación de ambos, prefieren poner el foco en Casado.