El fondo de reptiles también sirvió para financiar a un partido de extrema derecha. Un empresario sevillano hizo una donación de 18.001 euros a Alternativa Española -una formación política fundada por el yerno de Blas Piñar en 2003- con el dinero procedente de una de las subvenciones que le había concedido la Junta de Andalucía mediante el procedimiento con el que buscó el descontrol y la falta de fiscalización.

La ayuda a Alternativa Española fue detectada durante la fase de instrucción por la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil cuando rastreaba el destino que José Enrique Rosendo y José María Sayago -ex concejales socialistas en el ayuntamiento de El Pedroso, en la comarca sevillana de la Sierra Norte- habían dado a las cuantiosas ayudas que la Administración autonómica había otorgado a su grupo empresarial.

La desviación a este partido político se menciona ahora en los fundamentos de Derecho de la sentencia con la que la Audiencia de Sevilla ha condenado a 19 antiguos altos cargos de la Junta de Andalucía en la pieza política del caso ERE, entre ellos los ex presidentes Manuel Chaves y José Antonio Griñán.

Pasaje de la sentencia en la que se alude la transferencia a Alternativa Española.

El 15 de septiembre de 2004, semanas antes de su presentación en Madrid, Alternativa Española recibió una transferencia por importe de 18.001 euros en una cuenta corriente abierta en Bankia, concretamente en la sucursal ubicada en el número 31 de la madrileña calle de Núñez de Balboa.

El entramado empresarial del tándem

En concreto, el dinero fue librado desde una cuenta del BBVA de la que era titular Marco de Estudios y Proyección Siglo XXI SL y en la que figuraba como representante José Enrique Rosendo Ríos. Los investigadores policiales no tienen dudas de que la aportación procedía de una de las subvenciones recibidas por dicha empresa de la Junta de Andalucía con cargo a la partida 31.L o fondo de reptiles, destinándose también parte del dinero a comprar antigüedades en Francia para su posterior venta en otra de las empresas constituidas: San Fernando Rex SL.

Marco de Estudios y Proyección Siglo XXI SL era una de las compañías que integraban el entramado empresarial que controlaba el tándem formado por José Enrique Rosendo -fallecido en enero de 2016- y José María Sayago tras su paso por la política local, beneficiándose de ayudas públicas por importe superior a los 34 millones de euros (al 16,46 millones llegaron a pagarles). Se trata de la firma en la que estuvo trabajando entre abril de 2003 y mayo de 2004 una hija de José Antonio Viera, uno de los dos ex consejeros de Empleo condenados ahora a penas de prisión por malversación de caudales públicos.

La sentencia del 'caso ERE' cita el desvío de 18.000 euros de una ayuda a Alternativa Española, fundado por un yerno de Blas Piñar

En el atestado aportado al juzgado que instruye el caso ERE, la UCO puso de manifiesto que muchas de las empresas que integraban este entramado "carecían de actividad y trabajadores", constituyendo su verdadero objeto "la percepción de ayudas" de la Junta de Andalucía "en connivencia" con responsables públicos. Extinguida la responsabilidad penal de Rosendo con su fallecimiento, la investigación se dirige hacia Sayago en una de las piezas separadas del caso.

Cuando prestó declaración ante la Guardia Civil, el vicesecretario nacional de Comunicación de Alternativa Española -D.F.R.R.- precisó que José Enrique Rosendo se había afiliado al partido "entre 2003 y 2004" y que entró haciendo "una aportación inusual" de 100 euros mensuales. El testigo precisó que la transferencia de 18.001 euros fue una aportación para la presentación que la formación política hizo en el Palacio Municipal de Congresos de Madrid el 23 de octubre de 2004 y que en otras ocasiones había sufragado el coste de los billetes de AVE y estancias hoteleras con ocasión de reuniones del partido.

El vicesecretario nacional de Comunicación dijo desconocer los motivos por los que el empresario sevillano se había desvinculado de la formación política, si bien indicó a los investigadores que pensaba que Rosendo "era un submarino" que quería apoyar a Alternativa Española "para así perjudicar a terceros (partidos políticos), entre los que se encontraría el Partido Popular".

Constituido como partido político en octubre de 2003 bajo el liderazgo del abogado madrileño Rafael López-Diéguez, casado con una hija del fundador de Fuerza Nueva (Blas Piñar), Alternativa Española se presentó como una formación "de inspiración católica" que defiende el derecho a la vida, la familia, la unidad de España y la justicia social "desde una óptica específicamente cristiana". López-Diéguez encabezó la candidatura de Impulso Social- una plataforma formada por los partidos Familia y Vida, Comunión Tradicionalista Carlista y Alternativa Española- a las elecciones al Parlamento Europeo celebradas en 2014.

El líder de Alternativa Española explicó en la web oficial que el partido decidió recibir la donación de Rosendo porque cumplía "todos los requisitos" legales y sin que en aquel momento se pudiera sospechar sobre la procedencia del dinero aportado por el empresario sevillano, que tuvo intereses en medios de comunicación y los sectores de la alimentación y la hostelería.

El empresario que hizo la donación, que habia sido concejal del PSOE, era un "submarino" que pretendía apoyar a Alternativa Española "para perjudicar al PP"

Todo cambió a finales de 2004, cuando los responsables de la formación en Andalucía empezaron a percibir "ciertas actitudes desconcertantes en el señor Rosendo", al que acusó de generar "un ambiente de crispación" con su intento de promover cambios en los órganos directivos del partido.

"Lo determinante  fue una información que recibimos según la cual seguía manteniendo contactos con el PSOE en alguno de sus restaurantes. También nos preocupó su actitud de intentar involucrar a nuestros afiliados en sus actividades empresariales -por cierto, lo que a alguno les supuso su ruina profesional- u ofreciéndoles trabajo, lo que entendí que no era una práctica adecuada por mezclar la política con las actividades profesionales. Todo ello me llevó a pedir que nos apartáramos y, aprovechando que él y su mujer habían impagado y devuelto las cuotas, proceder a darle de baja como militante", agregó López-Diéguez.

En línea con lo que había declarado el vicesecretario de Comunicación a la Guardia Civil, el secretario general de Alternativa Española insistió en que pensaban que José Enrique Rosendo "estaba pretendiendo una infiltración" en el partido para llegar a los órganos de decisión "con fines espurios", como enfrentar a esta formación con otras. "Ante la simple sospecha de que detrás pudieran existir estos intereses, AES nó dudo ni un instante en prescindir del señor Rosendo y, en consecuencia, de quien podría haber sido un 'magnífico' benefactor", apostilló.