Caso "sin precedentes", "inédito", "desconocido". Estos son algunos de los calificativos que dedican desde el Parlamento Europeo las distintas fuentes consultadas sobre el proceso que se abre ahora con Oriol Junqueras, condenado a 13 años de prisión por los delitos de sedición y malversación. El Tribunal de Justicia de la UE ha dictaminado que al líder de ERC se le debería haber permitido adquirir su condición de eurodiputado y, por tanto, su inmunidad parlamentaria tras las elecciones europeas de mayo y el Supremo haber pedido un suplicatorio para poder mantenerle en prisión preventiva.

Ahora la clave reside en si el Supremo pedirá al Parlamento Europeo (PE) ese suplicatorio habida cuenta de que fue el alto tribunal el que presentó la cuestión prejudicial a Luxemburgo. Algunas fuentes con las que ha hablado este medio no quieren hacer ningún vaticinio sobre las posibilidades de éxito de dicha petición, aunque sí arrojan el dato de que "en un 90 por ciento de las ocasiones se levanta la inmunidad" de los europarlamentarios cuando así se ha solicitado. Otro alto cargo del PE asegura no tener dudas "de que el suplicatorio saldrá adelante con el apoyo mayoritario de la Cámara" que incluye al grupo socialista, popular y liberal, pero, advierte, "se trata de un largo proceso que no tarda menos de un año, lleno de trámites".

Comparecencias, testigos, dictámenes... En definitiva, un proceso garantista y puntilloso "donde el protagonista no sería tanto Oriol Junqueras como un juicio a España debatiendo el tema catalán", justo lo que a lo largo de estos años de desafío secesionista ha impedido la Eurocámara a pesar de los intentos recurrentes del independentismo por "internacionalizar el conflicto".

Oriol Junqueras no está inhabilitado y podría pedir acudir a Bruselas

Que Junqueras sea el líder del partido del que depende la investidura del socialista Pedro Sánchez, ERC, levanta susceptibilidades en otros grupos políticos como el PPE, con los populares españoles de punta de lanza. Creen que si la investidura sale finalmente con la abstención de los republicanos independentistas "el PSOE no encabezará la posición constitucionalista en el Parlamento Europeo".

No obstante, lo primero debería ser "ejecutar la condena de inhabilitación", que sea inmediata como ha pedido la Fiscalía porque podría darse el caso, advierten los medios consultados, de que Junqueras pidiera acudir a la Eurocámara en Bruselas para terminar de adquirir su condición de eurodiputado. A fin de cuentas, el líder de ERC se presentó a la sesión constitutiva del Congreso de los Diputados tras las elecciones del 28 de abril estando en prisión preventiva.

Entre medias está el informe jurídico que ha solicitado el presidente del Parlamento Europeo, David Sassoli, para determinar las consecuencias inmediatas que la sentencia del Tribunal de Justicia de la UE tiene para la composición de la Cámara, que cierra este viernes con motivo de las fiestas navideñas. Porque en la medida en que resuelva la condición de eurodiputado del líder de ERC, "puede que no se limite sólo a a Junqueras sino que alcance también a Carles Puigdemont y Antoni Comín", que tienen abiertos, por su parte, sendos procesos sobre si adquirieron la calidad de parlamentarios europeos.

El futuro de Puigdemont

Puigdemont quiere dejar de entrar a la sede del Parlamento Europeo como visitante, cosa que ha hecho no menos de media docena de veces, para hacerlo como eurodiputado. No cabe duda de que el Tribunal de Justicia europeo "ha sentado jurisprudencia", aunque todo lo que pase a partir de ahora "es un proceso complicado e incierto", dice una de las fuentes en conversación con El Independiente.

El proceso del suplicatorio arranca cuando "las autoridades nacionales pertinentes solicitan al Parlamento Europeo la suspensión de la inmunidad de un diputado", explica la página web oficial del PE. El presidente de la Cámara comunica en sesión plenaria que ha recibido dicha petición y lo remite a la comisión parlamentaria competente, esto es, la Comisión de Asuntos Jurídicos. Por su parte, la comisión "podrá pedir toda información o explicación que estime necesaria" y el diputado en cuestión tendrá la oportunidad de ser oído y presentar los documentos o cualquier otra prueba escrita que proceda.

La comisión aprobará a puerta cerrada un documento en el que recomendará al Parlamento que apruebe o desestime el suplicatorio, aunque su decisión no es vinculante puesto que son los eurodiputados, en pleno, los que toman la decisión para la que vale con mayoría simple.