El presidente de Vox, Santiago Abascal, ha reclamado al Gobierno la aplicación del estado de alarma, contemplado en el artículo 116 de la Constitución Española, para hacer frente a la crisis del coronavirus, al tiempo que ha acusado al Ejecutivo de mentir y ocultar información durante la gestión de la epidemia.

En un vídeo colgado en la cuenta oficial del partido -que la formación ha recuperado tras borrar el tweet que había generado el bloqueo de su perfil el pasado mes de enero-, Abascal ha subrayado que el Gobierno permitió eventos multitudinarios en toda España durante el fin de semana antes de tomar medidas drásticas de contención a partir del lunes. Abascal se ha referido al gobierno como "el del latex", tras señalar que varias ministras del Ejecutivo acudieron a las marchas del 8-M con guantes de este material.

"Este es un Gobierno que ha ido con guantes de látex a una manifestación mientras afirmaba a los españoles que no tenían que tomar medidas y que los focos estaban controlados", ha dicho Abascal. Vox ya había señalado este martes al Gobierno por no haber impedido los eventos masivos con anterioridad. Todo a raíz de conocerse el positivo del secretario general de la organización, Javier Ortega Smith, que participó junto al propio Abascal y el resto de dirigentes de Vox en el acto del partido en Vistalegre, este domingo.

"El Gobierno no ha tomado las medidas de contención en nuestras fronteras como se lo requerimos hace ya 3 semanas. El Gobierno tampoco restringió cuando debía la entrada de viajeros procedentes de China, Corea del Sur e Italia", ha denunciado el partido, que también pide "el cese inmediato de Carmen Calvo, responsable del desastre de gestión que se ha llevado hasta ahora y que Sánchez establezca un contacto con los líderes de los diferentes partidos para evaluar la necesidad de decretar el estado de alarma previsto en la Constitución".

El artículo 116 de la Constitución recoge los estados de alarma, excepción y sitio. Estos se encuentran regulados en la Ley Orgánica 4/1981 y, en el caso del estado de alarma, recoge específicamente el caso de "crisis sanitarias, tales como epidemias y situaciones de contaminación graves".

El articulado de la ley permite aplicar el estado en comunidades autónomas concretas, en las que el Gobierno asumiría el control con potestad para limitar la circulación de personas o vehículos; requisar temporalmente bienes o imponer prestaciones obligatorias; intervenir industrias, fábricas, talleres, explotaciones o locales de cualquier naturaleza; limitar o racionar el uso de servicios o artículos de primera necesidad; e impartir las órdenes necesarias para garantizar el abastecimiento en los mercados y centros de producción.