Euskadi y Cantabria quieren ser los segundos. Tras el levantamiento del Estado de Alarma y la Fase 3 en Galicia, las comunidades presididas por Iñigo Urkullu y Miguel Ángel Revilla quieren adelantar la medida al menos tres días y que 'la nueva normalidad' entre en vigor a partir de la medioanoche del viernes. Lo hará además con un acto este jueves con el que el presidente cántabro y el lehendakari escenificarán la recuperación de la normalidad en la movilidad entre ambas comunidades autónomas.

Durante una comparecencia en la que Urkullu ha repasado todas las medidas adoptadas por su Gobierno durante la crisis del Covid-19, el lehendakari ha asegurado que "está dispuesto" a levantar las restricciones de movilidad que aún persisten y a hacerlo en coordinación con Cantabria, la única de las comunidades colindantes que ha accedido a la pretensión de Urkullu de no agotar el plazo de la Fase 3 que vence el próximo lunes día 21.

El lehendakari ha justificado el adelanto en tres días por la buena situación epidemiológica que atraviesa el País Vasco y por la intensa relación que ambas comunidades mantienen, en especial en periodo estival como el actual, donde miles de ciudadanos vascos cuentan con una segunda residencia en localidades cántabras.

Nuevos contagios

Aunque la decision se da por prácticamente segura, oficialmente no se adoptará hasta el jueves, para cuando Urkullu ha convocado un Consejo de Gobierno extraordinario en el que se analizará el último informe de la consejería de Salud sobre la situacion epidemiológica. Los datos de las últimas 24 horas apuntan a 13 nuevos contagios en Euskadi y a un incremento de positivos en los dos brotes hospitalarios de Basurto y Txagorritxu. Pese a que la consejera ha asegurado que ambos focos están controlados, ha informado de un nuevo caso en el Hospital de Basurto, que elevaría a 42 los infectados y dos más en el hospital vitoriano, con un total de 15 infectados.

Urkullu ha asegurado que el acto con el que junto a Revilla celebrará el fin del Estado de Alarma permite dar "una señal de normallidad" que considera que es "importante trasladar a la ciudadanía". Pese a ello, ha alertado de que el final de la Fase 3 no supondrá en ningún caso el fin del riesgo: "El virús sigue ahí", ha recordado.

El lehendakari ha avanzado que se ultima una orden del Gobierno vasco en la que la Consejería de Salud detallará las limitaciones que seguirán en vigor en la "nueva nomalidad" que entrará en vigor a partir de este viernes. "Nada volverá a ser como era antes de la emergencia sanitaria. Aún tiene que haber muchos más miles de personas que empleen la mascarilla y mantengan las medidas de distancia e higiene personal".

PCRs al 10% de la población

Los datos aportados hoy por el Gobierno vasco han incluido un balance del número de pruebas PCR que se han realizado desde el inicio de la pandemia. La consejera Murga ha asegurado que hasta el momento 214.000 vascos se han sometido a pruebas PCR, lo que representa el 10% de la población total. Ha señalado que esa intensa actividad de pruebas es la que ha permitido controlar la extensión de la epidemia, "se busca el virus y lo encontramos".

Durante su intervención, Urkullu también se ha referido a las reticencias que pueda surgir por la llegada de visitantes de otras comunidades autónomas donde la incidencia de la pandemia ha sido mayor. Ha señalado que se trata de un problema global y que sólo la prudencia y prevención personal logra protegernos.

Urkullu también ha llamado a hacer "una reflexión" sobre la utilidad de la conferencia de presidentes autonómicos "donde no se decide nada". Ha asegurado que en las últimas 14 reuniones de presidentes autonómicos en torno a la evolución de la epidemia se han podido presentar propuestas, reflexiones y críticas pero no acordar decisiones. Urkullu ha asegurado que existen foros suficientes, bilaterales y multilaterales, en los que la toma de decisiones sí está presente.