La Policía Nacional ha detenido a los padres de un menor de 16 años por presuntamente obligarle, bajo amenazas y maltrato físico, a traficar con sustancias estupefacientes en el centro donde estudiaba en Alicante.

El cuerpo policial ha informado de que ha sido el propio hijo el que ha acudido a la comisaría a denunciar los hechos, lo que ha propiciado el registro del domicilio familiar, en el que se han encontrado una bombona de butano modificada, dos pistolas del calibre 22 milímetros y 9mm -esta última, con el número de serie borrado con dos cargadores-, dos táser preparados para funcionar, un pasamontañas, 147 cartuchos de munición, 2,16 kilos de marihuana y gran cantidad de sustancias anabolizantes, así como dos billetes de 500 euros falsificados.

Según estas fuentes, el menor de edad aseguró a los agentes que sus padres le estaban obligando desde hacía tiempo a traficar con droga, principalmente hachís, y les mostró a los agentes para que le creyeran 19 gramos de hachís, droga que ese día le habían dado para hacer una entrega, además de otra cantidad de sustancia de días previos que decidió guardarse para mostrarla como prueba.

Esa misma mañana, los agentes localizaron en el domicilio familiar a ambos progenitores, siendo inmediatamente detenidos por estos hechos.

Asimismo, el menor de edad también aportó pruebas sobre episodios de conducción temeraria vividos, al haber conducido su padre un vehículo recién adquirido a más de 240 kilómetros por hora, yendo a bordo del mismo el menor.

Finalmente, dado el temor del menor a las represalias de sus progenitores, se solicitó una orden de alejamiento que se extendió a su hermano.

Los detenidos, de 34 y 36 años, ambos de nacionalidad española, fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia de Alicante, que decretó en ingreso en prisión del padre del menor por estos hechos y, además, concedió la orden de alejamiento solicitada y suspendió temporalmente el ejercicio de la patria potestad de ambos progenitores.