Es una de las afecciones respiratorias graves más comunes y su importancia no está lo suficientemente reconocida según los expertos. La neumonía causó en 2017 - según datos del INE - más de 10.000 muertes y provocó unos 120.000 ingresos, según ha explicado hoy Esther Redondo, coordinadora en el área de de Salud Pública de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (Semergen).

Las cifras de mortalidad por neumonía son cinco veces superiores a las que causan los accidentes de tráfico y van acompañadas de un empeoramiento importante de la calidad de vida de quienes la padecen, especialmente en la población más vulnerable, los mayores de 65 años y los enfermos crónicos.

Sin embargo, la herramienta que puede prevenir muchos de los casos de neumonía y sus consecuencias está infrautilizada. Sobre la vacuna han hablado los expertos, a colación el próximo 12 de noviembre del Día Mundial contra la neumonía. "No tenemos datos oficiales sobre la cobertura vacunal, pero son más bajas que la de la gripe, que en España ya está muy por debajo de lo que recomienda la OMS", ha explicado Redondo.

En los últimos años, el Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas han ido incorporando la financiación de la vacuna del neumococo en los calendarios oficiales. Desde 2015 se incorporó la vacuna para los niños y desde 2016 se han ido incorporando las distintas comunidades autónomas, algunas a través de la vacuna polisacárida, de 23 serotipos (VNP23) y otros a través de la vacuna conjugada de 13 serotipos (CNC13). Mientras que la primera tiene un espectro más amplio, la segunda tiene "memoria" (no necesita un recordatorio a los cinco años como la VNP23).

"Al envejecer, el sistema inmune se va debilitando y se pueden desarrollar enfermedades que supongan un mayor riesgo ante una posible neumonía. Además, cada vez hay más evidencias de que la neumonía aumenta el riesgo de enfermedades cardiovasculares", ha subrayado Redondo.

"La neumonía es la primera causa de muerte por infección y no está reconocida como la enfermedad peligrosa que es ni por la comorbilidad que supone", ha indicado Rosario Menéndez, neumóloga de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR).

Menéndez ha incidido en la importante merma para la calidad de vida que causa la neumonía. "Un tercio de los casos graves ocasiona una sepsis, cuya mortalidad es igual o superior a la de un infarto", ha afirmado, "y cuando sucede descompensa enfermedades de base y hace bajar un peldaño la calidad de vida".

Desde la Atención Primaria, donde se quedan muchos casos de neumonías menos graves, la responsable del Grupo de Vacunas de la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG) ha incidido en que "que muchos casos no precisen hospitalización no significa que no dejen secuelas en la vida de los pacientes. Nosotros los vemos antes y después de la enfermedad y vemos cómo baja su calidad de vida, tanto a nivel físico como psíquico, por ver sus capacidades mermadas".

Los expertos han subrayado la importancia de mejorar las tasas de vacunación, "cuyo gasto quizás no debería considerarse como tal sino como una inversión, pues está demostrado que cada euro destinado a vacunas revierte en al menos cuatro euros para el sistema de salud pública", ha concluído Redondo.