La Junta de Andalucía ha mostrado este martes su oposición al uso de la mascarilla para tomar el sol en la playa y en las piscinas y apuesta por la directriz que implantó el verano pasado, según la cual es obligatoria para pasear por la orilla pero no para estar en la sombrilla en grupos que no superen las 6 personas.

El portavoz del Ejecutivo, Elías Bendodo, ha defendido en rueda de prensa que obligar a usar la mascarilla para tomar el sol es "una forma clara de ahuyentar al turismo" y ha reclamado que se tenga "sentido común" y que el Gobierno central rectifique "de forma urgente", informa Efe.

"El Gobierno de España no puede ser más papista que el papa y exigir que para tomar el sol haya que llevar la mascarilla puesta, desde Andalucía no entendemos este criterio", ha expresado el portavoz del Ejecutivo.

Disparate

Ha calificado de "disparate" la medida, ha resaltado la apuesta por el sector turístico y ha asegurado que en Andalucía quieren seguir aplicando la directriz del año pasado.

Al ser preguntado sobre si Andalucía permitiría no usarla aunque el Gobierno no rectificara, Bendodo ha respondido que "si en algo ha acertado el Gobierno es en las rectificaciones", por lo que espera que se haga también ahora.

Ha recordado que el año pasado no había una normativa estatal y el Gobierno andaluz lo reguló en el Boletín Oficial de la Junta (BOJA).