Ómicron ha cambiado las reglas de la pandemia y los especialistas en enfermedades infecciosas y microbiología clínica han lanzado un documento en el que piden "importantes modificaciones en la manera actual de abordar la vigilancia epidemiológica, la metodología diagnóstica, la organización de los sistemas asistenciales, la aplicación de medidas de prevención de la transmisión y, finalmente, la aplicación de los avances científicos en los campos de la terapéutica y de la utilización de las vacunas en la población general".

Uno de esos cambios atañe a la desinfección de superficies y el control de la temperatura a la puerta de edificios públicos. "Carecen de utilidad", explican los especialistas representados en la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (SEIMC), que acaba de hacer público su posicionamiento.

Piden además que se elimine la mascarilla obligatoria en exteriores - algo previsto en España para el jueves - "aunque sigue siendo recomendable mientras se mantengan las altas tasas de transmisión comunitaria actual, lo que está especialmente dirigido a proteger a la población vulnerable". También consideran que debe eliminarse el requisito del pasaporte Covid para entrar en locales públicos.

Los especialistas - encargados del tratamiento de enfermedades infecciosas y de la secuenciación o pruebas diagnósticas en laboratorios de microbiología - afirman que es necesario avanzar a lo que se ha denominado gripalización y empezar a enfocar la evolución en la incidencia de hospitalización y mortalidad. "Consideramos que la vigilancia de la incidencia de infección
basada en el diagnóstico individual de todos los casos de infección es
innecesaria y debería sustituirse por una estrategia basada en centros
centinela de Atención Primaria y hospitales similar a la usada para otras
infecciones respiratorias agudas".

También creen que deben dejar de realizarse pruebas PCR a la entrada en hospitales para otros procedimientos y creen que deben sustituirse por medidas de protección de los profesionales basadas en el riesgo de cada procedimiento. Actualmente se realiza prueba antes de cualquier procedimiento y las cifras de hospitalizados por y con Covid aumentan las estadísticas de casos. Según la SEIMC, esta cifra de Covid incidental es cinco veces superior que en otras olas.

Afirman que ya no es necesario hacer pruebas diagnósticas a casos leves en personas no vulnerables y creen que ha llegado el momento de fijar los esfuerzos, precisamente en personas vulnerables, que fijan en la edad mayor
de 65 años, personas con comorbilidades crónicas, inmunosupresión, cáncer en tratamiento, síndrome de Down mayor de 40 años y embarazo. Sobre ellos inciden en la necesidad de poner dosis de refuerzo, de fomentar que usen mascarillas FFP2 y la priorización en ellos de uso de antivirales y otros fármacos disponibles.

Llaman la atención, además, sobre la necesidad de que España mejore su capacidad de detección de variantes. "Se secuencia un número bajo de aislados en comparación con países de nuestro entorno, no se focaliza en pacientes de mayor riesgo de desarrollar nuevas variantes y proporciona los datos con retraso. Por ello, consideramos que es necesario desarrollar una nueva estrategia que corrija estos defectos".