No habrá acuerdo de última hora para la reforma de la ley del sí es sí entre el PSOE y Podemos. Ni habrá marcha atrás por parte del presidente del Gobierno. Los socialistas se aferran a su propuesta de modificación de la norma y entienden que las enmiendas que este lunes presentaron sus socios del Ejecutivo, "muy similares" a las de ERC y Bildu, son insuficiente: "No solucionan el problema". Dicho de otro modo, la única vía que "evita" las futuras rebajas de condenas a los agresores sexuales es la que se plasma en el texto del PSOE, según defiende Ferraz.

La portavoz de la ejecutiva federal, la ministra Pilar Alegría, fue nítida en sus respuestas en la sede del partido. Aunque el objetivo de la ley es "claro", que es "proteger" a las mujeres y a las víctimas de agresiones sexuales, también es "cierto y verdad" que generó "efectos indeseados", como centenares de reducciones de penas, y "es ahí donde el PSOE ha actuado, para evitar futuras rebajas de condenas, que no podrán realizarse con la proposición de ley que el PSOE presentó", justificó.

La ministra de Igualdad, Irene Montero, llamó este lunes a primera hora a los socialistas, desde TVE, a pensárselo de nuevo, a apoyar las enmiendas de los grupos "feministas y progresistas". O sea, las de Podemos, ERC y Bildu, que van "en la misma línea". "Es importante no confundir la cerrazón con el feminismo", respondió Alegría desde Ferraz, dando a entender que sus socios y los independentistas vascos y catalanes se han obcecado en su no a su propuesta de reforma, con el argumento de que se toca el consentimiento, cuando los socialistas insisten en que no es así.

Es importante no confundir la cerrazón con el feminismo", responde Alegría a la ministra Montero, que llama al PSOE a volver a la mayoría "feminista y progresista"

Ferraz, la Moncloa y Justicia llevan meses defendiendo que su fórmula es la única que garantiza que no haya rebajas de penas en el futuro, ya que se introduce una modificación sustancial: cuando concurran violencia o intimidación, las condenas serían automáticamente más altas. Podemos, ERC y Bildu creen que esa vía obliga a demostrar a la víctima si se resistió lo suficiente, de ahí que sostengan que la violencia y la intimidación deben ser consideradas una circunstancia agravante, pero no pueden "determinar" las condenas. Para Alegría, las propuestas de los tres grupos, "muy, muy similares", "prácticamente idénticas", "no solucionan el problema", no acaban con los efectos "indeseados" de la ley del sí es sí.

La portavoz, pese a que fue preguntada por los periodistas, no explicó por qué su camino es mejor técnicamente que el ofertado por por Podemos, ERC y Bildu. Justicia se negó a incorporar la violencia y la intimidación como mero agravante porque no aseguraba penas más altas —los agravantes han de ser apreciados por el juez— y porque dispararía de manera desproporcional las condenas. Lo que hizo el PSOE fue crear un subtipo agravado: que cuando hay violencia o intimidación se apliquen las penas más elevadas. Los socialistas dividen la agresión en dos escalones: el tipo básico y el subtipo agravado. Los morados hablan de un solo delito en el que pueden jugar agravantes.

Dónde están la mayoría y la "minoría"

No obstante, la ministra sí hizo hincapié que el hecho de que los morados hayan registrado su propuesta alternativa a la del PSOE es un avance: "Cuando uno plantea unas enmiendas es porque reconoce que hay un problema, reconoce que hay un error y algo hay que cambiar. Pero estas enmiendas no corrigen ese error y desde luego no evitan esos efectos indeseados, que es precisamente lo que evita la proposición del PSOE".

Cuando uno plantea unas enmiendas es porque reconoce que hay un problema, reconoce que hay un error y algo hay que cambiar"

PILAR ALEGRÍA, PORTAVOZ DEL PSOE

Los socialistas no reculan porque creen que los ciudadanos han entendido el mensaje: eran ellos los que han querido corregir la ley, y no Podemos. Y sienten que la mayoría de los españoles coincide con su mirada. Alegría recordó que la toma en consideración de la iniciativa, votada el pasado 7 de marzo por el pleno del Congreso, contó con 231 votos a favor, 58 abstenciones y 56 votos en contra. Es decir, que una mayoría sí respaldaba tocar la norma, frente a una "minoría" —y ahí estaba Podemos, junto a ERC y Bildu— que estaba en el no. Al PSOE no le preocupa que en este viaje le acompañe el PP, porque "lo importante es evitar los efectos indeseados", y eso "se consigue" con la propuesta del PSOE, reiteró.

Tampoco se moverá el calendario: "Lo conocen —dijo Alegría a los periodistas— y conocen los gestos del PSOE cuando registró su proposición de ley y los gestos de las enmiendas de otros grupos. Hay todo el interés en poder aprobar esta ley lo antes posible, porque es una ley demandada por los ciudadanos y que viene a generar soluciones".

Este jueves, la Comisión de Justicia aprobará el dictamen, que elevará al pleno del Congreso el jueves 20 de abril. El texto se encaminará de manera inmediata al Senado, donde se prevé que el pleno lo valide la semana siguiente, el miércoles 26.