El entrenador español Rafael Guijosa ha logrado finalmente abandonar Irán y se encuentra camino a España este viernes, poniendo fin a una dramática situación que lo mantuvo atrapado en Teherán durante varios días en medio del intenso conflicto bélico entre Israel e Irán. 

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El seleccionador de balonmano iraní, de 56 años y natural de Alcalá de Henares, se encuentra actualmente en Armenia esperando su traslado definitivo a territorio español mediante un avión de las Fuerzas Aéreas Españolas, según informa Europa Press.

Durante los días más críticos del conflicto, Guijosa se vio obligado a refugiarse en un hotel de la capital iraní, donde experimentó de primera mano los bombardeos israelíes. 

"Han caído bombas cerca y se ha notado", relataba angustiado el técnico a través de correos electrónicos, su única vía de comunicación disponible debido al bloqueo de redes sociales y aplicaciones como WhatsApp en territorio iraní.

El madrileño, quien regresó a Irán en septiembre de 2024 para su segunda etapa como seleccionador nacional tras una experiencia anterior entre 2012 y 2014, se encontraba concentrado con el equipo nacional a ocho horas de la capital cuando recibieron la orden de cancelar los entrenamientos y regresar inmediatamente a Teherán.

La salida exitosa de Guijosa ha sido posible gracias a un intenso trabajo diplomático que involucró múltiples instituciones. 

Francisco Blázquez, presidente de la Real Federación Española de Balonmano, ha agradecido especialmente las gestiones del Ministro de Exteriores José Manuel Albares, la Embajada Española en Irán y su embajador Antonio Sánchez-Benedito.

"Han sido días muy intensos, en los que la preocupación era creciente, pero afortunadamente se ha logrado una solución", declaró Blázquez, quien también reconoció la colaboración proactiva de la Federación Iraní de Balonmano, el Comité Olímpico Español presidido por Alejandro Blanco, y el presidente del Consejo Superior de Deportes, José Manuel Rodríguez Uribes.

Guijosa es considerado una de las figuras más importantes del balonmano español, habiendo formado parte del mítico "Dream Team" del FC Barcelona entre 1994 y 2002, período en el que el equipo conquistó cinco Copas de Europa consecutivas. 

Como jugador de la selección española, acumuló 538 goles en 119 partidos internacionales y fue nombrado mejor jugador del mundo en 1999.

Su regreso a España marca el final de una experiencia que comenzó como un desafío profesional prometedor pero que se transformó en una situación de emergencia debido a la escalada del conflicto regional.

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