La inmobiliaria Merlin se ha hecho con la Torre Agbar de Barcelona, oficialmente Torre Glòries, tras un acuerdo con el fondo Emin Capital por el cual pagará 142 millones de euros. La compañía compradora invertirá además 15 millones en de restauración del edificio, porque finalmente será un inmueble de oficinas y no un hotel.

Con este cambio, Merlin salva la moratoria turística de Colau. La compra del rascacielos diseñado por los arquitectos Jean Nouvel y Fermín Vázquez ha sido anunciada a través de un hecho relevante en la CNMV por la inmobiliaria.

Merlin nació de la fusión de la socimi del mismo nombre con Testa y Metrovacesa. Torre Agbar -que se llama así porque en su día alojó a la compañía del mismo nombre- fue inaugurado en 2005 y tiene una superficie bruta de 37.614 metros cuadrados, distribuida en 34 plantas sobre rasante y un auditorio con capacidad para más de 350 personas.

Merlin prevé obtener unos ingresos brutos anuales de 10,3 millones de euros por la explotación del inmueble, con una rentabilidad bruta estimada del 6,5% cuando esté a plena ocupación.