Félix Revuelta, fundador y presidente de Naturhouse, es uno de los accionistas afectados por la caída de Popular. Compró títulos del banco hace una década y calcula unas pérdidas de en torno a los 44 millones de euros.

La puntilla a los abultados números rojos que el empresario ha cosechado en los últimos años llegó la semana pasada cuando el que fuese el quinto banco español fue vendido por parte del FROB y del Mecanimo Único de Resolución (MUR), tras ser intervenido por falta de liquidez, a Santander por un euro. Como parte del acuerdo, se amortizaron todas las acciones del banco y perdieron todo su valor.

Revuelta está preparando acciones legales, en representación a cientos de minoritarios, para depurar responsabilidades y esclarecer cómo es posible que un banco quiebre de un día para otro.

Revuelta controla el 75% de la compañía y ganaría 55 millones si sus acciones alcanzan el precio que augura Santander

Entretanto, Santander, que se ha hecho con el 100% de los activos y pasivos de Popular en una operación que aplaude el mercado, acaba de emitir un informe sobre Naturhouse en el que recomienda comprar las acciones de la compañía. El banco que preside Ana Botín otorga a la cadena de tiendas de nutrición y dietética un precio objetivo de 5,55 euros que, respecto al precio de cierre de la acción del martes, supone un potencial de revalorización en bolsa del 28%.

Revuelta controla cerca del 75% de la compañía. Si, tal como augura Santander, los títulos de Naturhouse alcanzasen los 5,55 euros, el empresario se embolsaría 55,21 millones de euros, compensando las pérdidas sufridas con Popular.

Generosa política de dividendo

Los analistas de Santander reiteran su recomendación de compra sobre un valor que, en su opinión, ofrece un modelo de negocio que genera unos flujos de caja sostenibles y con visibilidad.

Además subrayan que el equipo gestor está comprometido a mantener una generosa política de remuneración al accionista con un pay out (porcentaje del beneficio destinado a dividendo) del 90%.

El informe subraya que los títulos de Naturhouse están infravalorados y considera que las previsiones de crecimiento que augura la compañía para 2017 son fácilmente alcanzables.