Naturgy, la antigua Gas Natural Fenosa, mantiene su órdago para frenar el hachazo a lo que cobra por sus redes de gas. La eléctrica ha decidido continuar con todas las medidas de presión hasta que la Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia (CNMC) apruebe de manera definitiva los recortes a la retribución que reciben las empresas que se dedican a la distribución de gas natural en España.

La CNMC había propuesto un fuerte hachazo de lo que cobran las redes de distribución de gas, un negocio controlado en un 70% por Naturgy, pero ha acabado reculando y lo ha reducido sustancialmente. El organismo ha tumbado su plan inicial de reducir los pagos un 17,8% en seis años y prepara la aprobación de una nueva circular que rebaja a la mitad el recorte previsto, hasta una rebaja de las retribuciones del 9,6% en el sexenio.

A pesar de la marcha atrás del supervisor, Naturgy no se fía y mantiene intactas las medidas de presión y mejorar las condiciones de la reforma. Nedgia, la filial de distribución de gas de Naturgy, aplica desde el pasado octubre una suspensión temporal de la obligación de trabajar para unos 300 de sus empleados. Esto es, que se queden en casa, pero manteniendo el sueldo.

 La compañía ha decidido paralizar su actividad comercial de crecimiento y nuevas inversiones en Nedgia hasta que se clarifique su futuro y la CNMC apruebe la circular de manera definitiva. Desde la eléctrica se esgrime que hasta conocer exactamente cuál será su retribución entre 2021 y 2026 sólo puede dedicarse al mantenimiento de su actividad actual y parar cualquier actividad que vaya más allá del mero trantrán.

 Ahora Naturgy acaba de pactar con parte de los sindicatos del grupo la ampliación de la medida por otros dos meses, hasta finales de abril.  Pero sólo con parte de los sindicatos. Los que han acordado mantener la medida con la compañía son UGT, CCOO y SIE, pero USO se mantiene al margen del pacto, carga contra el resto de organizaciones sindicales por permitir la prolongación de la medida e incluso amenaza con denunciar el incumplimiento del convenio colectivo.

Los sindicatos se han lanzado a enviar comunicados internos a la plantilla con cruce de acusaciones y de reproches. USO critica a los otros tres sindicatos por firmar la suspensión temporal de empleo y, sobre todo, ve “inaceptable” la actual prórroga cuando la nueva propuesta de la CNMC ya “suaviza a términos razonablemente admisibles y previsibles la retribución del gas, con lo que ese recorte de plantilla no tiene justificación alguna”. “Reivindicamos la incorporación inmediata al trabajo de nada menos que 300 trabajadores afectados”, señalan desde USO, que solicita la recolocación en otros puestos de los empleados afectados por la suspensión temporal de empleo.

El choque se produce a la vez que los sindicatos negocian con Naturgy un acuerdo de garantías de empleo en caso de que alguna de las empresas del grupo sea vendida a otra sociedad y con las diferentes organizaciones sindicales tomando posiciones ante la plantilla en este asunto. USO vincula ambos aspectos –acuerdo de garantías y suspensión de empleo en Nedgia-, lo que ha provocado el enfado de otros sindicatos.

“Respetamos a aquellos sindicatos que no firmaron el acuerdo de parada de actividad, pero no entendemos que se quiera mezclar con el acuerdo de garantías”, sostiene UGT en un comunicado interno. “Lo que sí es verdaderamente inaceptable es intentar confundir a la plantilla (…) En la situación coyuntural que vive el grupo Naturgy, ya bastante inquietud e intranquilidad existe en la plantilla como para aportar más confusión”.

Desde UGT se defiende la prolongación de la medida de mandar a casa a parte de la plantilla de Nedgia, ya que ese acuerdo “ha permitido que ningún trabajador pierda su empleo por razón de la parada, mantenga su salario y adscripción a su puesto de trabajo. Con las prórrogas se ha ido reduciendo el número de trabajadores en rotación y se ha incrementado los que pasan a reducción de jornada”.

El pacto para llevar la suspensión de empleo en Nedgia hasta finales de abril contempla modificaciones en la medida original para suavizar sus efectos. Para la red de comerciales de la compañía, se reduce el tiempo de rotación pasando de las tres semanas al mes en casa que pasaban hasta ahora a sólo una semana en casa y tres de trabajo y se amplía el número de empleados con reducción de jornada. Y para el área de Operaciones de Negdia a parte de la plantilla se le recorta el tiempo en casa, de una semana al mes a un día por semana, mientras que a otros seguirán con tres semanas al mes fuera y una en el trabajo.

El recorte de la CNMC

La prórroga de la suspensión temporal de empleo se mantiene, según la compañía, porque persiste la incertidumbre sobre la regulación, ya que la CNMC no ha aprobado todavía la circular sobre la retribución de las redes de distribución de gas natural. El regulador ha decidido recular y suavizar su propuesta de recorte de las retribuciones.

La nueva circular planteada por el regulador, remitida ya a finales de enero al Consejo de Estado y que afecta al periodo regulatorio 2021-2026, recoge, en términos de retribución media, que la actividad de distribución pasaría de aproximadamente 1.420 millones de euros con la metodología vigente a los 1.283 millones de euros, lo que supone esa reducción del 9,6%.

En términos absolutos, la retribución para la actividad de distribución de gas natural, que en casi un 70% corresponde a Naturgy pero que también efectúan otras empresas como Madrileña Red de Gas, Nortegas o Redexis, entre otras, para el periodo 2021-2026 sería de 7.698 millones de euros, frente a los 8.520 millones actuales y los 6.990 millones propuestos en un primer momento.