La economía española creció un 4,2% en el primer trimestre del año, en comparación con el mismo periodo del año anterior. Se trata de una mejora con respecto al dato -3,8%- que avanzó el Instituto Nacional de Estadística (INE) en abril y que ha confirmado este viernes.

De esta forma, España recupera el producto interior bruto (PIB) que tenía antes de la pandemia del coronavirus y se sitúa como la economía europea que más crece. Entre el último trimestre de 2022 y los tres primeros meses de este año, la economía creció un 0,6%, una décima más de lo previsto.

Pese a estos datos, el INE confirma que se produjo una caída del consumo, del 1,4%, y que fueron las exportaciones las que tiraron de la economía. En un trimestre, las exportaciones crecieron un 5,7%.

Con respecto al año anterior, las exportaciones crecieron un 10,2%, algo que, según fuentes del Ministerio de Asuntos Económicos, confirma la competitividad de las empresas españolas.

Teniendo en cuenta que el gasto público también retrocedió en el último trimestre, es evidente que el sector exterior aportó más a la economía. Según el INE, la demanda nacional aportó 1,4 puntos al crecimiento del PIB, mientras que la demanda exterior impulsó la economía en casi tres puntos, 2,8.

Desde el departamento que dirige Nadia Calviño destacan que España ha "acelerado su crecimiento y es la economía que más crece en Europa, con una tasa interanual del 4,2%, cuatro veces más que la media europea". No obstante, cabe recordar que el PIB español fue también el que más sufrió en 2020 la crisis del coronavirus y es el que más ha tardado en recuperarse de entre las grandes economías comunitarias.

Mejora de las previsiones

La revisión al alza de estos datos va en la senda de la mejora de las previsiones macroeconómicas que han venido realizando las distintas instituciones nacionales e internacionales. El Banco de España pronostica un crecimiento del PIB del 2,3% para este año, por encima del 2,1% que se ha fijado el Gobierno. También la OCDE es ahora más optimista y mejora su previsión de PIB hasta el 2,1%.

No obstante, ambas instituciones ponen deberes a la economía española. El supervisor bancario alerta de que la inflación seguirá siendo un riesgo el próximo año, cuando se prevé que los precios suban más que en este. Por su parte, desde la OCDE instan a España a mejorar su competitividad.