La patronal del gran consumo Aecoc ha cargado contra la reducción de la jornada laboral que contempla pacto presentado este lunes por el PSOE y Sumar de cara a una hipotética investidura de Pedro Sánchez. "Si en una sociedad con productividad baja rebajamos el número de horas, vamos a destrozar la competitividad de la economía española", ha dicho el presidente de Aecoc, Javier Campo, durante la apertura del 38º congreso Aecoc de Gran Consumo, que reúne en Zaragoza a cientos de directivos de fabricantes y distribuidores.

El presidente de la organización empresarial ha recordado que España tiene que competir con el resto de los países con una productividad que "está un 24% por debajo de la zona euro". Y "si llegamos a las 35 horas al final de la legislatura, la economía española va a sufrir", ha alertado. "Yo viví la llegada de las 35 horas semanales a Francia y no funcionó bien, porque hay un nivel de mandos intermedios que es muy difícil de sustituir", ha detallado en rueda de prensa.

Campo ha expuesto que España tiene 1,1 millones más de empleados que en 2019, aunque se trabajan las mismas horas que en el último año antes de la pandemia. Eso supone un daño para la productividad y la nueva coalición de Gobierno que se podría formar estaría "profundizando el problema". La combinación de costes laborales altos y productividad baja augura "un mal futuro", ha añadido.

Campo ha apelado también al consenso político. "En la política se ha instalado un clima de división, del que no puede salir nada bueno. Esperemos que la política recupere el sentido común porque hay mucho que hacer porque necesitamos reformas a largo plazo", ha remarcado el presidente de la patronal que agrupa a más de 33.000 empresas con una facturación conjunta supone cerca del 25% del PIB nacional.

En cuanto a la inflación, el presidente de Aecoc ha mostrado confianza en que baje el año que viene y ha mostrado confianza en que en alimentación se dé "una bajada más fuerte" de precios que en el conjunto de la economía. Asimismo, ha tachado de "injustificadas e inmerecidas" las críticas recibidas en el sector por el alza de precios vertidas incluso desde las filas del Gobierno.

En este sentido, ha remarcado que pese a tener un contexto desfavorable con una enorme sequía que ha hundido las cosechas un 20%, "el precio de los alimentos ha crecido menos que en la eurozona". "El sector ha sido víctima de esta situación. Los márgenes de nuestras empresas han caído y eso demuestra que lo hemos pasado mal y nadie se ha aprovechado de esta circunstancia", ha remarcado.

Un informe con datos de la Agencia Tributaria y del Banco de España sostiene que los márgenes de los fabricantes de alimentos han bajado un 25,4 % y los del comercio minorista un 8,2 % desde el primer trimestre de 2021. Acto, Campo seguido ha destacado la necesidad de que las empresas "recuperen sus márgenes, porque es la única forma de crear empleo y ganar productividad".

Asimismo, ha expuesto que el consumo ha resistido gracias a que el empleo se mantiene. Sin embargo, ha vaticinado que no se recuperarán los niveles previos al Covid-19 hasta el primer semestre del 2025. También ha recordado que el 70% de las empresas está preocupada por la caída de las ventas en volumen.

Auge de la marca blanca

En esta línea, ha explicado que el cliente está cambiando de patrones de consumo. Entre otras cosas, ha incrementado la compra de marcas de distribuidor frente a la marca de fabricante. Eso ha conllevado "una pérdida de valor para el conjunto del gran consumo". Y como el consumidor no va a recuperar el poder adquisitivo en el corto plazo, "la pérdida de valor se va a quedar con nosotros un tiempo largo". ha abundado.

"El empleo el año que viene crecerá de forma moderada, pero no se va a destruir. Mientras esté en estos niveles, la confianza del consumidor se mantendrá bien y eso va a ser un soporte para el gran consumo", ha añadido.

Por otro lado, Campo ha criticado la presión fiscal creciente. "Deberíamos poner el foco en la reevaluación de la partida de gastos en lugar de seguir incrementando los impuestos, porque por esa vía vamos a acabar dañando seriamente la economía", ha incidido.

También ha mostrado su malestar por regulaciones que afectan de lleno al sector. "El impuesto al plástico se ha hecho de manera precipitada y con una muy mala ley que nadie sabe interpretar", ha zanjado. Además, ha advertido que en materia medioambiental, "el tsunami regulatorio que se nos viene encima no tiene precedentes", en referencia a la apuesta de la Unión Europea por la reducción de emisiones.