Es el ‘dueño’ del Ibex 35 y el Gobierno de Pedro Sánchez ha puesto el ojo en sus inversiones. Hasta la fecha, BlackRock pasaba inadvertido para el Ejecutivo. No para las grandes compañías del selectivo, acostumbradas a comunicar a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) las nuevas posiciones de este banco de inversión.

El grupo inversor tiene participaciones repartidas en una veintena de empresas del Ibex 35. O lo que es lo mismo casi 25.000 millones distribuidos en acciones de las compañías más importantes de España tras la nueva operación anunciada recientemente. El mayor fondo del mundo anunció la compra del fondo de infraestructuras Global Infrastructure Partners (GIP) por alrededor de 12.500 millones de dólares (11.415 millones de euros, al cambio actual). GIP era propietaria de un 20% de Naturgy, una de las empresas denominadas estratégicas para el Gobierno.

Esta adquisición es la que ha destapado el recelo del Ejecutivo. Para que un fondo o cualquier inversor pueda adquirir el 10% de una empresa estratégica ha de comunicarlo al Estado y éste dará o no el plácet. Con la adquisición del negocio de GIP, BlackRock se ha convertido en dueño de la participación de la energética y Moncloa entiende que ha de pasar por el veredicto del Gobierno. “El Gobierno debe impedir la toma de control del 20% de Naturgy por BlackRock", afirmó el portavoz de Economía y Hacienda de Sumar, Carlos Martín, en un mensaje publicado en la red social X, antes conocida como Twitter. Con esta operación. El banco será el máximo accionista de la gasista.

Ante los planes del Gobierno, BlackRock emitió un comunicado en el que se oponía a que Economía tenga que dar luz verde a la operación: "Los grandes déficits gubernamentales implican que la movilización de capital a través de asociaciones público-privadas será fundamental para financiar infraestructuras. Además, a medida que el capital se ha vuelto más escaso en un entorno de tipos de interés más altos, las empresas están explorando oportunidades de asociación para sus activos de infraestructuras, a fin de mejorar sus retornos sobre el capital invertido o de recaudar capital para reinvertir en sus negocios principales".

Pero además de Naturgy, BlackRock tiene una predilección por las empresas energéticas españolas. En concreto, casi el 50% de los casi 25.000 millones de euros que tiene invertidos en el Ibex 35 pertenecen a este sector. Tal es así que es el máximo accionista de Enagás, con un 5,42% por un valor de unos 225 millones de euros.

El mismo porcentaje posee en Iberdrola, pero con una participación que ronda los 3.900 millones de euros, unos 1.500 millones menos de lo que obtendrá con la adquisición de Naturgy. La petrolera Repsol también figura en su cartera con un montante de 890 millones de euros (5,5%). La sociedad mantiene posiciones en Redeia (antes Red Eléctrica), con un 5%. Solaria cierra el apetito inversor en materia energética con una participación que ronda los 80 millones.

Otra empresa estratégica invertida

El Gobierno de Pedro Sánchez ha elevado el interés en Telefónica, una de las empresas que también es considerada estratégica por su papel fundamental en el acceso a redes, por sus negocios en ciberseguridad y por la infinidad de contratos que tiene firmados con el Estado en ámbitos tan importantes como el de Defensa.

BlackRock es poseedor del 5% de Telefónica con una inversión que ronda los 890 millones de euros. La institución, por tanto, es uno de los principales dueños de la operadora. Así, tanto Gobierno como el 'dueño' del Ibex 35 se verán las caras en la empresa de telecomunicaciones, puesto que el Estado elevará su participación hasta el 10%.

Telefónica no es la única empresa tecnológica en la que BlackRock mantiene posiciones. Amadeus, compañía que dota de servicios tecnológicos al sector turístico, es su otra gran apuesta en el Ibex 35, con un 5,2%. Cellnex, torrera que se expande por buena parte del mundo, está participada por el fondo de inversión en un 5%.

La banca, otro sector estrella

BlackRock mantiene un fuerte interés por la banca española. El fondo de inversión es el primer accionista en BBVA y Santander. El banco de inversión ha visto este año cómo la subida de tipos le ha beneficiado para aumentar su potencial en la banca española ya que las acciones de las entidades en el Ibex 35 salieron reforzadas el año pasado.

Tan solo Unicaja y Bankinter son las únicas entidades que se libran de BlackRock en su accionariado. Así, el fondo posee el 5,9% de BBVA, el 4,99% de CaixaBank, el 3,96% de Sabadell y el 5,4% de Santander. Lejos de la banca, la mayor posición del banco americano la mantiene en Fluidra, el fabricante de piscinas, donde conserva un 8% del capital.

El apetito inversor en BlackRock se traslada también a Fluidra. De hecho, es el máximo accionista de la compañía y su participación se eleva a más del 6%. La última adquisición se produjo en noviembre del año pasado.

El sector inmobiliario no se libra de los tentáculos de BlackRock, si bien es cierto que la cantidad invertida en Colonial no supera los 130 millones de euros. El banco ostenta el3,9% del accionariado.