El rey emérito, Don Juan Carlos I.
El voto en contra que el PSOE ha emitido este miércoles en la Mesa del Congreso no sólo ha vuelto a impedir que se investigue en la Cámara Baja al rey emérito, sino que ha ampliado la grieta que existe entre el ala socialista del Gobierno y Unidas Podemos. El choque de trenes en la coalición por la cuestión de la Corona ya viene de atrás, pero el nuevo rechazo que hoy ha evidenciado el PSOE, uniendo sus votos a PP y Vox, para evitar "cuestionar las instituciones" del Estado ha precipitado una condena pública de los morados a sus socios de coalición, justo cuando la unidad entre ambos partidos brilla por su ausencia también por la polémica cuestión del mercado eléctrico.
La crítica más dura ha venido de parte de la secretaria de Estado, Ione Belarra (Podemos), quien ha publicado un duro mensaje en Twitter en este caso contra la titular de Defensa, Margarita Robles, quien ha defendido públicamente la postura negativa del PSOE a crear una comisión de investigación sobre el emérito. Belarra ha acusado a la ministra socialista de "alinearse con la derecha y los ultras" en esta cuestión, una actitud que ha tachado de "decepcionante".
"Que el Congreso investigue, como han reconocido sus letrados que puede hacer, las actividades presuntamente ilegales de Juan Carlos, es, precisamente, defender las instituciones", alegaba la dirigente de Podemos en la red social. "No tengo tiempo de leer tuits", alegaba, al rato, la ministra de Defensa, en respuesta a las acusaciones de Belarra. Robles ha mantenido su postura y se ha remitido de nuevo a "la decisión de la Mesa" sobre no investigar al emérito, pese a que los letrados del Congreso avalaron por primera vez este martes que la Cámara pudiese abrir pesquisas sobre el uso de las 'tarjetas black' por parte de Juan Carlos I.
El pasado mes de diciembre, la Mesa del Congreso vetó también esta iniciativa de Podemos amparándose en la opinión de los letrados que, entonces, no apoyaban la solicitud al contar únicamente con la firma de los morados. Sin embargo, esta vez los de Pablo Iglesias volvieron a registrar la proposición con el apoyo de ERC, Bildu, Más País, la CUP, el BNG y Compromís, y contaban con el aval de los letrados, pero el PSOE ha vuelto a negarse. De ahí la tensión entre los socios gubernamentales.
Desde el PSOE justifican que el asunto ya está bajo investigación judicial en el Tribunal Supremo y apuntan, además, que la jurisprudencia del Tribunal Constitucional viene señalando que entre las funciones del Parlamento no está el control de la Monarquía ni de la Jefatura del Estado. Para el Grupo Socialista, su posición es coherente con la doctrina de la Cámara.
Unidas Podemos ya asumía que la investigación sólo podría afectar al presunto uso de tarjetas opacas por parte de Juan Carlos I tras su abdicación en junio de 2014, dada la inviolabilidad del titular de la Corona, pero los representantes del PSOE en la Mesa han mantenido su tradicional posición y han unido sus votos a los del PP y Vox para inadmitir la iniciativa. Así las cosas, la creación de esa comisión de investigación no podrá ser debatida en el Pleno del Congreso.
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