La discriminación de policías y guardias civiles destinados en Cataluña en vacunación contra el Covid-19 llegará al Parlament, donde Alba Vergès, o el próximo conseller de Salud, deberá explicar por qué sólo el 15% de este colectivo ha recibido la primera dosis cuatro meses después de empezar la vacunación, frente al 100% de los mossos, según denunció este martes Carolina Darias. La ministra de Sanidad anunció que el Gobierno asumirá la vacunación de este colectivo tras la renuencia de la Generalitat a hacerlo.

Ahora, el grupo de Cs en el Parlament ha registrado una batería de preguntas para que el Govern explique por qué se ha producido este retraso en el proceso de vacunación de los cuerpos de seguridad estatales, lejos del 76% de media nacional con primera dosis. Los naranjas preguntan al Govern por qué se suspendió la vacunación, si se advirtió de ello al Gobierno y si ha habido alguna discrepancia entre ambas administraciones que justifique el retraso.

El secretario de Salud Pública de la Generalitat, Josep Maria Argimon, ha argumentado que el retraso se produjo porque recibieron tarde los censos de ambos grupos. Cuando se inició su vacunación, el Gobierno ordenó suspender la inoculación de AstraZeneca, y cuando se reemprendió decidieron hacerlo dando prioridad absoluta al segmento entre 60 y 65 años, prescindiendo de los colectivos esenciales.

Pocos mayores de 60 entre Policía y Guardia Civil

Finalmente, la Comisión de Salud Publica acordó no inocular esta vacuna a menores de 60 años, y el colectivo de policías y guardias civiles de esa edad o mayores "es muy pequeño en Cataluña" argumentan desde la Generalitat para explicar las cifras.

"Es indignante" ha denunciado Carlos Carrizosa, recordando que "ha habido un agravio comparativo intolerable" respecto a la vacunación de los mossos. El líder de Cs en Cataluña ha cuestionado tanto la actuación de la Generalitat como la del Gobierno, al que acusa de "institucionalizar" la discriminación al asumir la vacunación de policías y guardias civiles.

"Por qué la Generalitat no está obligada, como todas las autonomías, a vacunar a todas las fuerzas de seguridad del estado", ha cuestionado. Carrizosa ha asegurado que actuarán tanto en el Parlament como en el Congreso para "llegar hasta el final" y que se depuren las responsabilidades políticas.

Presión del Gobierno

Desde la Delegación del Gobierno en Cataluña, sin embargo, niegan la mayor y advierten de que se pusieron en contacto desde el primer momento con la administración autonómica para organizar la vacunación de los colectivos esenciales dependientes del Estado. "Lo he pedido de todas las maneras posibles y no lo he conseguido y creo que no se puede esperar más", señalaba Darias en el Senado, reconociendo que las gestiones del Gobierno en este sentido han sido "un fracaso".

Los sindicatos de Policía y asociaciones de guardias civiles llevan semanas denunciando que la Generalitat ha dejado atrás a los agentes de estos cuerpos en la campaña de vacunación en la que han inyectado las primeras dosis solo a 1.200 de los más de 7.300 de esa comunidad.

Sanitarios de la Policía Nacional y de la Guardia Civil se encargarán ahora de la vacunación de los agentes de ambos cuerpos destinados en Cataluña. Darias se ha comprometido "incluso reservando vacunas para ello", pese a que desde JxCat le acusan de saltarse los protocolos de la Generalitat.

Largas de la Generalitat

Las fuentes de Interior han indicado que el ministerio ha hecho gestiones desde el mes de marzo en colaboración con la Delegación del Gobierno en Cataluña y los ministerios de Sanidad y Política Territorial para corregir esa disfunción y han añadido que están preparados para proceder a la vacunación con rapidez en cuanto les trasladen los viales

Ya antes, la delegada, Teresa Cunillera, se había puesto a disposición del Govern para facilitar la vacunación de sus funcionarios. La Generalitat contestó el 12 de febrero anunciando que tres días después se podrían en contacto para iniciar los trámites.

Por este motivo, la Delegación del Gobierno trasladó el 16 de febrero a la Consellería de Interior todas las personas de contacto para coordinar la programación, si bien el 24 de febrero los Departamentos de Interior y Salud les convocaron a una reunión para abordar la cuestión, cuando ya hacía quince días que se estaba vacunando a los cuerpos de seguridad y emergencias en Cataluña.

En la reunión, que se celebró el 4 de marzo, la Policía Nacional y la Guardia Civil facilitaron todo el personal e infraestructura para poderse vacunar y se planificó un dispositivo para agrupar a los 7.000 agentes de ambos cuerpos en nueve grupos, según las fuentes.

Del 5 al 23 de marzo, se planificó la vacunación para los días 25, 26 y 29 de ese mes, aunque, sin embargo, el 24 de marzo por la tarde, antes de iniciarse la vacunación, la Policía Nacional y la Guardia Civil recibieron órdenes de la Consellería de Salud para desprogramar toda la vacunación de los menores de 60 años; la mayoría.

Ante esta situación, la Delegación del Gobierno pidió explicaciones, que no llegaron hasta el pasado 8 de abril, cuando la Generalitat les notificó, informa Efe, que se recomendaba no administrar AstraZeneca al colectivo de menores de 60 años.