El PP hará llegar hoy al Gobierno el documento específico que ha elaborado el área de Economía del partido, liderada por el vicesecretario Juan Bravo, y que ha contado con la colaboración de expertos en la materia y antiguos altos cargos y exministros de la etapa Rajoy: Fátima Báñez, Cristóbal Montoro o Álvaro Nadal, perciben desde dentro de la formación. La memoria ampliará y profundizará las líneas marcadas ya por el presidente popular Alberto Núñez Feijóo este miércoles, como las ayudas directas de entre 200 y 300 euros para las rentas más bajas, la bajada del IRPF para las rentas por debajo de los 40.000 mil euros o la reducción del gravamen a la electricidad del diez y del gas del 21% al cuatro por ciento.

Feijóo se comprometió a hacerle llegar al presidente un paquete de propuestas amplio en el primer y último encuentro mantenido -ya como presidente y líder de la oposición- hace más de dos semanas en La Moncloa; después de que el Gobierno echase en falta un papel. En esa cita Sánchez rechazó todas sus sugerencias económicas y priorizó la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ).

Ahora, con esta propuesta ya física y presentado como alternativa económica, el PP obliga a Sánchez a mover ficha y concretar los aspectos que desde las filas socialistas crean oportunos. Más allá de los 16.000 millones en ayudas y los 20 céntimos de descuento en el litro de combustible anunciados a finales de marzo. Feijóo apuesta, además por rebajar la tributación por módulos del régimen simplificado del IVA y el régimen especial en aquellos sectores especialmente afectados por el aumento de los costes como la agricultura y la ganadería, el trasporte o la industria. Y, además, por actuar sobre el Impuesto de Sociedades para que las empresas empleen ese ahorro en amortizar inversiones en eficiencia energética o transformación digital.

El desquite ideológico

Fuentes del PP confirman a El Independiente que la mayor parte del tiempo dedicado para la reunión del último Comité Ejecutivo Nacional (CEN), de este miércoles, "fue para tratar los asuntos económicos". Y que lo abordado fue "muy parecido a la que se dio en abierto" al inicio. Con todo, Feijóo si "dedicó unos minutos" para recordar que la estrategia del PSOE es "aislar" al partido en beneficio de Vox; establecer una dicotomía entre Sánchez y la ultraderecha. Una estrategia del miedo que, sin embargo, en Ferraz empiezan a cuestionarse.

Los populares explican que, dada la coyuntura económica actual, "la intención" de Feijóo es desquitarse, en parte del protagonismo que ocupa lo ideológico en la confrontación política diaria, para centrarse en cuestiones 'de comer'; algo que afecta a un gran cómputo de la sociedad. Y de ahí quiere intentar el dirigente gallego extraer esa amplia mayoría social que lleva reivindicando desde que dio el paso para presidir la formación conservadora.

El PP apuesta por la realpolitik, con propuestas pragmáticas

Si bien una de las razones que promovieron la germinación de Vox en 2014 fue, entre otros, el segundo plano al que habían sido desplazados los valores identitarios del partido en la etapa Rajoy, ahora el protagonismo que la economía vuelve a tener en un estado de inflación y de escalada de precios, puede beneficiar al PP. En definitiva, y aunque no emplean el término, los populares quieren apostar por una realpolitik: propuestas pragmáticas en tiempos donde el discurso lo copa todo. Esa es la meta para llegar a La Moncloa.

Prevén escasa consideración

Desde el PP no confían demasiado en que el Ejecutivo nacional vaya a tener en cuenta alguna de las propuestas planteadas en ese texto económico. Sobre todo tras las valoraciones previas de algunos miembros del consejo de ministros nada más anunciarse las líneas generales y antes de poder consultarlo. Es el caso de la titular de Defensa Margarita Robles, que acusó a Feijóo de estar "buscando titulares" en lugar de "arrimar el hombro".

Ayer el Gobierno anunció que, una vez cuente con el dossier y haya datos específicos, estudiarán las medidas. Todo, pese a considerarlas como "respuestas del pasado" poco consonantes con las políticas que están desarrollándose en el entorno europeo. "Van contracorriente" de la dirección marcada por el FMI y aplicar una reducción de impuestos puede "agravar" el problema de la inflación.

Asimismo, la titular de Hacienda, María Jesús Montero, vinculó cualquier reducción del gasto con recortes del Estado del Bienestar, algo "falaz y demagógico" para los populares.

Feijóo apela a la "razón" de Macron

Ante las reacciones del Ejecutivo, y Feijóo defiende que las valoraciones "no son exactas", porque sí hay otros miembros del entorno europeo que han bajado el IRPF o "dado bonos de 300 euros a las rentas más bajas". Ve "razonable" que haya una devolución a los ciudadanos del "dinero extra ingresado en la Hacienda Pública" en un periodo de inflación alta. "No creo que todos los países de Europa estén equivocados. Me da la sensación de que el más equivocado es el nuestro".

En ese sentido, y antes de remitir el texto a Moncloa, Feijóo ha apelado a que Macron -con quien Sánchez mantiene buenas relaciones- "tiene razón" al coincidir con Le Pen, en el debate para las presidenciales francesas, en que "si hay un antimodelo de control de precios es el español". Y es que el presidente galo puso en relieve que "es un ejemplo de lo que no debe ocurrir".

Por ello, los populares insisten en la necesidad de dar luz verde a este paquete económico. A cambio, abren la puerta a que, de aceptarse, valorarían hacer lo propio con el real decreto 'anticrisis' confeccionado por el PSOE que se someterá próximamente a votación en el Congreso de los Diputados. Un texto que saldría adelante al sumar conservadores y socialistas mayoría.