El Gobierno estudia celebrar las generales entre semana para evitar una alta abstención en diciembre

"¿Y por qué en domingo?". La pregunta la devuelven en el entorno más próximo a Pedro Sánchez cuando se inquiere por la fecha de las próximas elecciones generales, previstas para finales de año, teóricamente para diciembre. Porque no, no hay que dar por hecho que los comicios caerán, como ha ocurrido tradicionalmente, en domingo. La Moncloa estudia, de hecho, celebrarlos a mitad de semana. Pero aún no hay nada decidido.

El solo hecho de que el jefe del Ejecutivo y su equipo den vueltas a la posibilidad de situar las legislativas en un día laborable ya es un paso novedoso. Hay un doble argumento que justificaría, señalan, sacarlas del domingo: la necesidad de alejar en lo posible las elecciones del puente de la Constitución y de la Inmaculada —6 y 8 de diciembre— y la constatación de que no por celebrarlas en una jornada de trabajo se resiente la participación. En la Moncloa invocan el precedente más inmediato: el de las autonómicas madrileñas del 4 de mayo de 2021. Isabel Díaz Ayuso eligió esa fecha, martes, y la movilización se disparó: del 64,27% de 2019 —cuando coincidieron con las municipales en toda España y con las regionales en otras 12 comunidades— al 71,74% de 2021. 7,44 puntos más en unos comicios que se celebraron en solitario. Ayuso arrasó en aquella cita, al pasar de 30 a 65 escaños (35 más), a cuatro de la mayoría absoluta.

Es muy improbable que los comicios sean el 10, final de un largo puente, pero tampoco se acaba de ver la conveniencia del 3, el arranque de días de descanso para muchos ciudadanos

La última ventana disponible que tiene Sánchez para convocar las generales es la del domingo 10 de diciembre de 2023. Es la fecha en la que se pondrían las urnas si no hubiera ningún tipo de anticipo, si se llegara a una disolución automática de las Cortes. Pues bien, ese día es prácticamente imposible que tengan lugar los comicios, aseguran en la Moncloa, porque es el final de un largo puente, el último antes de la Navidad. En ese caso, la movilización, calculan, sí bajaría.

Pero por esa misma razón tampoco acaba de convencer del todo el domingo 3 de diciembre, porque ya es una fecha muy próxima al puente y parte de los ciudadanos pueden marchar de viaje ese fin de semana para comenzar a disfrutarlo. Dada la cadena de festivos, en la Moncloa están examinando la posibilidad de situar las generales antes del día 3. La duda es cuándo.

Sánchez siempre ha apuntado a diciembre como mes para las generales. Así que podría optar por el viernes 1 o el sábado 2, pero probablemente tropezaría con el mismo problema: la salida probable de muchos ciudadanos hacia otros destinos para unos días de descanso. La alternativa, en ese caso, sería ubicar las legislativas en la semana previa, entre el lunes 27 y el jueves 30 de noviembre.

"No hay nada decidido, queda mucho tiempo aún", señalan fuentes muy próximas al presidente, que indican que en todo caso se buscará siempre la máxima participación de los votantes, y no su desmovilización. Y es que lo que el Ejecutivo y el PSOE necesitan es que la izquierda acuda a las urnas para poder revalidar la coalición gubernamental, una opción que por ahora las encuestas, salvo el CIS, sitúan como una opción más improbable que una victoria de Alberto Núñez Feijóo.

Participación histórica en 1982

No sería, desde luego, la primera vez que se celebraran elecciones en España fuera de un domingo. Además de las madrileñas de 2021, hay otro caso reciente, el de las catalanas del 21 de diciembre de 2017, jueves, convocadas por el Gobierno de Mariano Rajoy en virtud de la activación del artículo 155 de la Constitución. La participación entonces, en una campaña muy polarizada (como la del 4-M en Madrid), fue histórica, del 79,09%, frente al 74,95% de la convocatoria anterior, del 27 de septiembre de 2015, domingo. Las primeras catalanas, las del 20 de marzo de 1980, se hicieron un jueves, y la movilización fue del 61,34%.

Elecciones en días laborables ha habido en España: las catalanas de 1980 y 2017 o las madrileñas de 2021, pero también las generales de 1977, 1979 y 1982, el referéndum de 1986 o las europeas de 1989

En los primeros años de la democracia también las elecciones se celebraban entre semana. Así, los primeros comicios democráticos tras la muerte de Franco tuvieron lugar el miércoles 15 de junio de 1977 y la participación fue del 78,83%. El jueves 1 de marzo de 1979 fueron las siguientes generales (68,04%), y las de 1982, las del 28 de octubre, en las que arrasó Felipe González, cayeron en jueves (79,97%). El referéndum sobre la permanencia de España en la OTAN se celebró el 12 de marzo de 1986, miércoles (59,42% de participación), y las elecciones europeas de 1989 fueron el 15 de junio, jueves (54,71%). Es decir, ejemplos ha habido de todo, pero en efecto la participación no se hundió en los casos en los que las urnas se abrieron un día laborable.

En Ferraz y en la Moncloa reiteran que la disolución de las Cortes, como manda la Constitución, es una prerrogativa exclusiva del presidente, así que la decisión será enteramente suya, pero a priori en la cúpula no rechazan la posibilidad de que las generales se celebren a mitad de semana.

En cualquier caso, se percibe un sentimiento de cierto optimismo en el partido tras meses muy duros. El presidente, este miércoles desde Burgos, volvió a presumir de datos económicos frente a los "discursos apocalípticos de los agoreros de siempre" y recordó, informa EFE, que el martes el Fondo Monetario Internacional, una institución no "sospechosa de ser ni progresista ni de izquierdas", elevó las previsiones de crecimiento económico para España este año y el siguiente.

"Cifra tras cifra, previsión tras previsión, todos los datos sonríen a España por encima de la media europea", sostuvo, para pedir a los españoles que, pese a la guerra de Ucrania, miren al futuro con "precaución" pero también "con esperanza" porque el Gobierno está "haciendo las cosas bien".

La Moncloa están segura de que la Ley de Vivienda estará lista, cerrado el pacto con Podemos, antes del 28-M

La Moncloa espera abrochar el camino hacia el 28-M con un pacto con Unidas Podemos para cerrar la Ley de Vivienda. Las negociaciones ya están en su última fase y en el entorno del presidente se muestran seguros de que el texto ya estará listo antes de las autonómicas y municipales, porque se logrará sellar un acuerdo con los morados que proyectaría una imagen de fortaleza de la coalición tras semanas de tensiones a cuenta de la ley del sí es sí. La primera meta volante será, desde luego, el 28-M, último ensayo antes de unas generales que quizá se celebren de nuevo entre semana.