José Manuel Albares ha iniciado su periplo por Marruecos depositando dos ofrendas florales, una en la tumba de Mohamed V y otra en la de Hassan II, abuelo y padre del actual monarca Mohamed VI, respectivamente. Ante ambas sepulturas ha guardado un minuto de silencio antes de escribir unas palabras en el libro de honor del mausoleo.

En su primera visita bilateral de la legislatura, el ministro de Asuntos Exteriores ha escenificado la buena sintonía de las siempre complicadas relaciones hispano-marroquíes. "Es una de las relaciones más estrechas y ricas del mundo", presume el socialista en una entrevista con la agencia de noticias estatal Map.

En Rabat Albares se ha reunido este jueves con el primer ministro marroquí, Aziz Ajanuch, con quien ha abordado asuntos comerciales, migratorios y el Mundial 2030 que albergarán ambos países junto con Portugal. Según Exteriores, el encuentro se ha prolongado durante media hora en la sede del jefe del Gobierno. No han precisado, no obstante, si se ha tratado la parálisis que sufren las aduanas de Ceuta y Melilla, sin fecha de apertura.

"Asociación estratégica multidimensional"

Albares también ha departido sobre la Copa del Mundo de fútbol que se celebrará en 2030 en España, Marruecos y Portugal. En un comunicado, el primer ministro marroquí ha subrayado que se celebra "en el marco del fortalecimiento de las relaciones entre Marruecos y España en diversos ámbitos, particularmente en el aspecto político, económico y cultural".

Durante la reunión, "ambas partes saludaron las relaciones privilegiadas de amistad y de cooperación que unen a los dos países". Albares y Ajanuch también alabaron "la calidad de la asociación bilateral, basada en la buena vecindad, la confianza mutua y el diálogo permanente y constructivo" tras el cambio de posición en el litigio del Sáhara Occidental y una severa crisis diplomática.

Con palabras similares a las de Albares, Marruecos asegura que "se ha establecido como una asociación estratégica multidimensional que abarca todos los ámbitos de cooperación". Los intercambios comerciales entre ambos países alcanzaron una cifra récord de 20 billones de euros y las empresas españolas pugnan por conseguir contratos en sectores como el agua, el ferrocarril y las infraestructuras.

"Marruecos es un país amigo"

Albares, que también se ha reunido con su homólogo marroquí Naser Burita, ha visitado el colegio español de Rabat en plena construcción del nuevo centro educativo que se inaugurará en 2026 con una oferta de 1.000 plazas. Con un coste aproximado de 21,6 millones de euros, este nuevo centro educativo -cuyas obras de construcción ya han comenzado- tendrá una superficie global de unos 20.000 metros cuadrados.

"Es un momento importante porque lo que vosotros hacéis aquí es construir día a día una comprensión mutua", ha manifestado en un mensaje dirigido a la comunidad del centro el ministro, que ha resaltado la importancia de su labor para "transmitir una España moderna, diversa y plural que mira al mundo y que mira a Marruecos como lo que es: un país vecino, un socio estratégico y, sobre todo, un país amigo". En Marruecos existen once centros educativos españoles.