Las declaraciones de Fernando Clavijo este martes desde Rabat compartiendo "enteramente" el cambio de posición de España en el contencioso del Sáhara Occidental han abierto en canal a Coalición Canaria y al nacionalismo canario poniendo en cuestión su apoyo histórico a la causa del pueblo saharaui en un momento, además, marcado por los reveses que la Comisión Europea ha sufrido por las sentencias del Tribunal de Justicia que declaran nulos los acuerdos de pesca y agrícolas suscritos con Marruecos por la falta de consentimiento del pueblo saharaui.

Fuentes de la presidencia del Gobierno canario se reafirman en las manifestaciones de Clavijo en una rueda de prensa del ministro de Asuntos Exteriores marroquí Naser Burita. "No hay mucho cambio. 'Asumo' la posición de España porque como presidente del Gobierno de Canarias ni puede ni debe decir otra cosa en un viaje a otro país. Canarias no tiene competencia en política exterior. Por lealtad institucional ni cabe ni procede que el presidente canario diga otra cosa que asume", explican categóricamente fuentes de su gabinete a El Independiente.

Voces internas en contra

Sus declaraciones de este martes, confirmadas este miércoles, han supuesto un terremoto en Coalición Canarias. Figuras vinculadas al partido han rehusado en conversación con este diario reaccionar públicamente pero han precisado que no se ha convocado al partido para abordar este cambio de posición.

Agrupaciones como Asamblea Majorera, integrada en Coalición Canaria, ha emitido un comunicado en el que mantiene "su firme compromiso con la autodeterminación del pueblo saharaui, como ha venido haciendo históricamente desde su configuración política”. “Los lazos que nos unen con la lucha del pueblo saharaui son históricos y no vamos a abandonarlos”, ha deslizado su portavoz, Mario Cabrera. “Nuestra posición se mantiene firme en la defensa de la autodeterminación del pueblo saharaui”.

“Coalición Canaria no abandonará ni traicionará uno de sus sellos identitarios, no traicionará al Sáhara libre ni a su pueblo”, advierten desde AM-CC desafiando el relato del presidente canario. Desde el partido recalcan que esto no es solo una cuestión de “hermanamiento con el pueblo saharaui”, sino que se ha avalado en el marco de los acuerdos auspiciados por las Naciones Unidas (ONU). “Se trata además de una cuestión de justicia, y no podemos seguir permitiendo esta complicidad de los Estados miembros de la UE con Marruecos mientras este siga ahogando al pueblo saharaui”, subrayan desde Asamblea Majorera.

"Una traición" de Clavijo

A la censura se han sumado figuras como Carmelo Ramírez, consejero de Cooperación Institucional y Solidaridad Internacional del Cabildo de Gran Canaria y vinculado a Nueva Canarias. "“Es lamentable que tengamos un presidente de Canarias que nos arrastra a una situación que no queremos la mayoría de las y los canarios, que siempre ha estado a favor de la causa del pueblo saharaui”, ha indicado Ramírez. A su juicio, las manifestaciones de Clavijo implican una vulneración de la legalidad internacional, ya que “el asunto del Sáhara Occidental es un tema de descolonización y se tiene que resolver a través de un referéndum de autodeterminación y de independencia por parte de las y los propios saharauis”.

Ramírez ha tachado de "traición" la posición de Clavijo. "También un apoyo al genocidio que Marruecos intenta perpetrar en el Sáhara Occidental, expulsando y exterminando a la población saharaui, así como al expolio de sus recursos naturales, que ya ha tenido una sentencia en contra del Gobierno marroquí del Tribunal de Justicia de la Unión Europea, que anula los acuerdos comerciales de pesca y agricultura”.

“Reafirmar la soberanía de Marruecos en el Sáhara Occidental significa que se anima y se apoya el expansionismo marroquí, con el peligro que eso supone para los propios canarios y canarias”, ha aseverado. “Hay que recordar sus apetencias de extender las aguas territoriales, en un territorio que no le pertenece, y teniendo en cuenta que Marruecos no solo no va a frenar la emigración, sino que la está utilizando como un arma de chantaje contra el Gobierno de España”.

Para Ramírez, “Clavijo se está poniendo en brazos de los propios marroquíes. Yo no sé qué intereses hay de fondo, pero sí sé que, desde el punto de vista democrático, el Parlamento de Canarias, en reiteradas ocasiones, se ha manifestado apoyando la causa del pueblo saharaui, del referéndum de autodeterminación y del respeto a la legalidad internacional”, ha concluido. “Ahora, Clavijo se sitúa fuera de esta legalidad, porque hacer un reconocimiento de la ocupación marroquí no tiene valor jurídico alguno, al ser un asunto que se tiene que resolver en el marco de las Naciones Unidas, pero sí es un apoyo a las tesis ocupacionistas que el Gobierno de Marruecos viene desarrollando en el Sáhara desde hace 50 años, no solo expoliando las riquezas, sino violando los
Derechos Humanos”.