Cobby, el chimpancé más longevo del EEUU, ha fallecido a los 63 años de edad en el Zoo de San Francisco (EEUU) por causas naturales. La directora jecutiva de la Sociedad Zoológica de San Francisco, Tanya Peterson, ha asegurado en un comunicado que "Cobby era parte de San Francisco".

El chimpancé fue criado en la década de los sesenta por humanos, de ahí que el primate tuviera una excelente relación con los cuidadores del zoológico con los que compartía tanto tiempo. "Es insustituible y nuestros corazones están rotos", comentó Peterson.

Los responsables del zoológico apodaban a Cobby como Papá, ya que era "un mentor carismático y compasivo para los chimpancés más jóvenes" así como el pacificador cuando surgían conflictos entre el resto de chimpancés machos.

Este ejemplar superó con creces el promedio de los animales de su especies, situado en 33 años entre los chimpancés que habitan en la naturaleza y de 50 a 60 años para los que viven bajo la atención humana.

El Zoo de San Francisco ha publicado un emotivo mensaje de despedida en su cuenta de Facebook: "Cobby fue una parte importante de la familia #SFZoo. Tocó tantas vidas, y el personal y los visitantes tienen tantos recuerdos de él. Fue un privilegio conocerlo. Te extrañaremos mucho, Cobby".