Joaquín Cortés ha recibido el alta hospitalaria tras haber estado ingresado durante una semana. El bailarín cordobés, de 54 años, ha explicado su diagnóstico en las puertas del hospital de La Princesa, en Madrid. "Casi me muero, pero gracias a Dios estoy aquí", ha asegurado tras haber sufrido un desvanecimiento mientras jugaba con sus hijos.

Según ha explicado Joaquín Cortés, le han diagnosticado una neumonía que, en vez de un virus, ha sido producido por una bacteria. Una vez recibido el alta, el artista vuelve a casa para continuar con su recuperación, y ha posado para la prensa en la puerta del centro hospitalario con una sonrisa.

Llegó a urgencias con "muy poca saturación de oxígeno en sangre". "Me encontraba cansado", ha contado el bailarín.

"Ha sido algo inesperado, algo surrealista, pensé que tenía gripe y casi me muero", ha asegurado el coreógrafo, quien recalca que "lo más importante es que estamos aquí". El motivo de su enfermedad, según ha contado el propio Joaquín Cortés, ha sido el estrés.

Joaquín Cortés atiende a los medios a la salida del hospital

Aún tiene que hacerse más pruebas

"Me habrán hecho más de veinte pruebas, he sufrido una neumología bastante grave", ha dicho el bailarín, quien señala que los médicos le han diagnosticado que desde niño ha sido asmático. "Y casualmente, el baile ha sido mi antídoto, me ha salvado". Sin embargo, aún no tiene el alta médica porque tiene que continuar haciéndose pruebas.

Ha sido un "susto tremendo" y "muy grave" para Joaquín Cortés, que prefiere mirar el lado bueno. "Me han hecho una ITV entera y los médicos me han dicho que tengo una edad biológica de 20 años", ha contado. Al parecer, los médicos le han asegurado que es un "portento físico".

Joaquín Cortés ha querido agradecer al hospital y a sus trabajadores el trato que ha recibido. Con tranquilidad, pero sin pausa, su intención es retomar su agenda lo antes posible. "No puedo hacer el bestia, tengo que estar un par de semanas tranquilas para recuperar mis pulmones al cien por cien".

A mediados de julio empieza una gira mundial en Nueva York. "Me lo tomo con sentido del humor, podría estar muerto, he vuelto a nacer", concluye el artista que desea retomar su actividad para subir a las tablas con su espectáculo "Esencia".