El PSOE y Ciudadanos han alcanzado este miércoles un acuerdo para la reforma del Impuesto de Sucesiones y Donaciones en Andalucía que permitirá la casi eliminación de este gravamen y garantiza los presupuestos de 2018, al contar con el apoyo de la formación naranja para sacar adelante las cuentas.

El acuerdo supone situar el mínimo exento de padres a hijos en sucesiones en un millón de euros por heredero, lo que supondrá que el 95% de los andaluces no tenga que pagar este impuesto, mientras que del impuesto de donaciones quedarán exentas las de 1 millón de euros de padres a hijos con la condición de que éstas vayan dirigidas a crear empresas o puestos de trabajo. Además, la reforma implica incrementar las reducciones autonómicas ya existentes de las bases imponibles de contribuyentes herederos con discapacidad.

El líder andaluz de Ciudadanos (Cs), Juan Marín, ha asegurado que el acuerdo alcanzado supone el "certificado de muerte" de este gravamen impositivo, mientras que la consejera de Hacienda y Administración Pública, María Jesús Montero, ha dicho que "solo pagarán" el Impuesto de Sucesiones los que reciban una herencia millonaria y lo sean.

En rueda de prensa, la presidenta andaluza, Susana Díaz, ha destacado hoy que tras el acuerdo entre PSOE y Ciudadanos la Junta es la primera administración que garantiza sus cuentas para 2018, por lo que tiene "estabilidad y horizonte despejado" para que el próximo año sea "de crecimiento y recuperación de derechos".

Respecto al pacto para reformar el Impuesto de Sucesiones, la línea roja que ponía Ciudadanos para acordar las cuentas, Díaz ha dicho que "ya no hay excusa" y que con el mínimo exento en un millón de euros se cumple lo que dijo en el Parlamento en julio, que "lo pagarían los millonarios".