El Gobierno de Navarra de Uxue Barkos se desgasta. Los navarros, además de no aprobar su gestión ni a su lideresa, comienzan a posicionarse para favorecer un cambio en el Parlamento foral. Es lo que refleja al menos la encuesta que sobre intención de voto ha elaborado la Universidad Pública de Navarra (UPNA), conocido como ‘Navarrometro’ y que augura la entrada de Ciudadanos en la Cámara foral si hoy se celebraran elecciones.

La irrupción de la formación de Albert Rivera se suma al incremento que el sondeo otorga a otras dos formaciones no nacionalistas, hoy en la oposición, como el PP y Unión del Pueblo Navarro, ambas con un parlamentario más. En cambio, dos de las cuatro formaciones que conforman la coalición de Gobierno, Geroa Bai y Podemos, obtienen un retroceso en sus apoyos, lo que les restaría un representante a cada uno de ellos. Sólo Bildu rentabiliza su presencia en el Ejecutivo, al mejorar con un parlamentario su peso parlamentario. Izquierda-Ezquerra se mantendría como está.

Ciudadanos, UPN y PP mejoran su presencia en el Parlamento Navarro. Entre los nacionalistas, sólo Bildu rentabiliza la gestión de Gobierno

Según el sondeo, el reparto de los 50 escaños del Parlamento de Navarra arrojaría un empate entre las formaciones de Gobierno actuales y las que conforman la oposición, con 25 representantes cada una de ellas. La sorpresa la arroja Ciudadanos que logra tener presencia por primera vez y que capitaliza una parte del rechazo que la gestión realizada por el Gobierno de Barkos ha suscitado en amplios sectores de la sociedad navarra desde que asumió el poder en julio de 2015.

Empate entre Constitucionalistas y nacionalistas

Las políticas de reacción a  medidas adoptadas por gobiernos anteriores, así como las vinculadas a la promoción del euskera, los símbolos, la memoria histórica o la cuestión territorial con el País Vasco parece que han pasado factura el Gobierno Barkos. Así, su formación, Geroa Bai pasa de 9 a 8 parlamentarios y la propia presidenta ni siquiera logra el aprobado en la valoración de la sociedad navarra, que la puntúa con un suspenso, un 4,8. Calificación que en el ecuador de su mandato ha caído de la que logró en el barómetro del año pasado, un 4,92.

En el caso de Podemos el comportamiento es idéntico, pasando de 9 a 8 representantes. En el cuatripartito sólo Bildu mejora sus posiciones, con un diputado más y situándose como la segunda fuerza de la Cámara con 9 parlamentarios.

La presidenta Uxue Barkos recibe un suspenso a su gestión al frente del Ejecutivo foral desde julio de 2015

La portavoz del Gobierno, María Solana ha restado hoy importancia a los datos del sondeo asegurando que no pueden ser calificados de “malos” ya que les permiten conocer la opinión de la ciudadanía sobre su gestión y las tendencias que son más valoradas para ser tenidas en cuenta, “nuestra intención es hacer las cosas bien”.

Quien de nuevo ganaría las elecciones sería Unión del Pueblo Navarro (UPN), con 16 representantes, uno más que los que posee actualmente. También el PP mejora con un parlamentario más y alcanzar los tres representantes. El revés del ‘navarrómetro’ se lo lleva el Partido Socialista que lidera María Chivite, que dejaría escapar dos representantes y caería hasta los cinco escaños en el Parlamento foral de los siete actuales.

Si este escenario se registrase la fractura de Navarra sería evidente y con dos bloques claramente divididos y que complicarían la gobernabilidad de la Comunidad Foral.