Una semana después de estallar las primarias internas en Podemos Madrid Ciudad por la negativa de los seis concejales de Manuela Carmena a participar, la situación interna amenaza ruptura. Y el pasado sábado se dio cuenta de ello en el Consejo Ciudadano Municipal Ampliado, que viene a ser el cónclave que reúne a los 27 miembros del Consejo Ciudadano Municipal de Madrid presidido por el ex Jemad Julio Rodríguez, además de a unas sesenta personas, la mayoría vocales vecinos procedentes de los distritos de la capital.

La reunión del Consejo Ciudadano Ampliado arrancó el sábado a las 19.30 horas y terminó antes de las 23 horas y fue, en palabras de varios asistentes consultados que piden no revelar su nombre, un espejo de la división y la tensión que atraviesa la federación madrileña. Vocales de distritos afines a los seis ediles amenazaron con dejar de donar dinero al partido si se consuma finalmente la expulsión de los seis, encabezados por la portavoz del ayuntamiento Rita Maestre. También hubo quien arremetió contra los concejales y los tildó de "traidores". La corriente Anticapitalista -la más crítica con el equipo de Gobierno- se convirtió así sorprendentemente en la más moderada, tratando de contemporizar entre ambas partes.

Anticapis, los contemporizadores

El ex Jefe del Estado Mayor tomó la palabra largamente. Según la versión oficial, Rodríguez "explicó que no había salido a comentar nada en los medios ni a difundir comunicados porque cree que es un asunto interno del partido y que por tanto se tiene que arreglar dentro. Ha renunciado a cualquier invitación para apariciones en teles o periódicos", reza un argumentario interno.

Muchos no afines a los seis concejales criticaron el proceso de expulsión durante el consejo

Hasta la fecha nada había trascendido de este encuentro, que viene a ser un consejo deliberativo que engloba a las bases de Podemos con cargos menores y a los altos cargos de la capital. No se toman por tanto decisiones en el Consejo Ciudadano Ampliado, pero sí se debate y se pulsa el estado de ánimo de los inscritos. "Lo que se vio el sábado es que las corrientes clásicas de pablistas y errejonistas ya han sido superadas", resume un participante. "La zozobra actual ha provocado inquietud en cada círculo, con inscritos que defienden la expulsión e inscritos que amenazan con un casus belli en carso de apartarse a los seis".

Así y siempre según las fuentes consultadas, los vocales de las Juntas de Distrito de Carabanchel, Latina y Vallecas lanzaron la advertencia de que o se reintegra a los cargos municipales expedientados o se suspende el pago de las cuotas por su parte. "Hubo incluso momentos tensos protagonizados por miembros de un mismo círculo". Solo asistieron dos personas por círculo. Los 60 miembros del Consejo Ciudadano Ampliado se designan de manera rotatoria, por lo que sus integrantes cambian. También hubo varias ausencias al convocarse un fin de semana.

Carabanchel, La Latina y Vallecas

Según la versión afín a la dirección, el ex Jemad habló de "revalidar el gobierno del ayuntamiento y repetir la candidatura con Manuela Carmena a la cabeza". Aseguró estar entre los "partidarios de hacer todo este proceso con tiempo porque se irían mínimo dos meses en ello". También dijo que habló con Rita Maestre desde agosto y que había mantenido reuniones con todos los concejales de Podemos, incluso "de dos en dos". Y que recientemente detectó "una especie de resistencia pasiva" en los seis ediles, aunque que éstos iban entre los nueve primeros de la lista. Justificó la suspensión de militancia porque "acudirán a elecciones como Podemos pero en la lista presentada por Carmena".

Julio Rodríguez dijo que detectó "una especie de resistencia pasiva" en los seis ediles

El argumentario concluye: "Se hicieron más de 30 preguntas, hubo en todos los sentidos y aspectos. Y se dieron respuestas". De acuerdo con otros asistentes consultados, es en la ronda de preguntas donde se produce el enfrentamiento dialéctico.

El Consejo Ampliado fue en realidad una continuación del que tuvo lugar el martes de la semana pasada de manera extraordinaria entre los 27 consejeros, sin vocales vecinos. Ahí también se produjeron episodios cargados de nervios, pero este sanedrín está abrumadoramente formado por afines al secretario general municipal Julio Rodríguez. "El martes Julio nos presentó un informe en el que se ratificaba en todo lo que ha comentado después la dirección. Nos dijo además que contaba con el respaldo de Pablo Iglesias".

Hay inscritos que hasta ahora habían respaldado la línea de Iglesias a nivel estatal y de Ramón Espinar a nivel regional frente a los afines a Errejón que no están dispuestos a tragar ahora con las expulsiones, cuentan testigos. Muchos no afines a los carmenistas criticaron las formas y el proceso. Uno de ellos describe el proceso de expulsión como el del film "Minority Report". Otros sí son furibundamente partidarios de la purga y contrarios a los seis electos. Todos los consultados afirman que es muy difícil en estos momentos calibrar el espíritu que defienden los cuadros de la formación morada porque todo es muy reciente.

Zozobra en los círculos

El ex Jemad se reafirmó el pasado martes en la necesidad de que Carmena encabece la lista electoral. Pero Carmena quiere a sus afines en puestos de salida, y ha dicho que no tiene nada que hablar con Podemos. Lo que dificulta un acuerdo futuro sobre las listas para tratar de reeditar la victoria de mayo de 2015 en las próximas municipales. Los concejales expedientados son Rita Maestre, Jorge García Castaño (delegado de Economía), Esther Gomez, José Manuel Calvo (Urbanismo), Francisco Pérez y Marta Gómez. Calvo y Pérez, por ejemplo, pertenecían hasta ahora a la corriente pablista.

La trifulca política del sábado se produjo delante de Julio Rodríguez, quien habría observado con atención lo sucedido. Tanto los leales a Carmena como los fieles a la dirección municipal hablan permanentemente de altura de miras y de acuerdos. Pero las relaciones están muy deterioradas. Entre las bases se han impulsado manifiestos de apoyo a los ediles en los que piden que se retiren las suspensiones de militancia, y manifiestos exigiendo la expulsión sin paños calientes. Cada día que transcurre con el conflicto latente Ahora Madrid pierde opciones para volver a gobernar el Palacio de Cibeles.