Empezó en Castilla y León y ya se han sumado Madrid, Murcia y, la última, Cantabria. Cada vez son más los candidatos de Ciudadanos que perdieron en primarias contra los oficialistas y quieren revisar los votos y ahora pueden seguir sumando casos también a nivel provincial. "Pueden levantarse los muertos en Andalucía", aseguran fuentes consultadas por El Independiente. Concretamente, en Almería. Las dudas en esta provincia existen desde el minuto uno y el pucherazo hecho realidad en Castilla y León amenazan con una nueva reclamación al Comité de Garantías que ya se está moviendo.

Almería es territorio Villegas. Por esta circunscripción se presenta el secretario general a la lista del Congreso de los Diputados, que ha elegido esta provincia por su raíces familiares. Pero también es territorio Bosquet. La actual presidenta del Parlamento de Andalucía, Marta Bosquet, ganó las primarias de Ciudadanos para ser cabeza de lista por Almería a las elecciones a la Junta de Andalucía por 29 votos de diferencia. Recibió 178 apoyos (54%) frente a los 149 votos (45%) de su principal rival, Rafael Bretones Cruz. En último lugar quedó Sixto Miguel Buendía, con 2 votos (0,6%).

La candidata oficialista en Almería, Marta Bosquet, ganó por una diferencia de 29 votos y el 54% de los apoyos

Si echamos la vista atrás, es precisamente en Almería donde los resultados de las primarias quedaron más igualados. Por orden, el candidato de Málaga, Javier Imbroda, fue elegido con el 65% de los votos (223); Francisco Carrillo, en Córdoba, consiguió el 74% (143 votos); María del Mar Sánchez, en Granada, el 78% (297 votos) y Sergio Romero, en Cádiz, reunió el 90% (214).

Según ha podido saber El Independiente, militantes de Ciudadanos en Almería ya están movilizándose para reclamar información al Consejo de Garantías ante lo que consideran sospechas fundadas de otro pucherazo en sus primarias. No solo apelan al ajustado resultado obtenido, con menos de 30 votos de diferencia. Las fuentes consultadas aseguran que la victoria de Bretones estaba asegurada, según los cálculos que manejaba la candidatura. Contaban con 180 votos favorables, una cifra que sabían podía sufrir una leve variación, pero no de 31 votos como finalmente sucedió.

El día de la votación, los defensores de Bretones ya celebraban, aunque algo cautos, la victoria de su candidato. Su sorpresa llegó al conocerse los resultados, calcados a los que habían contemplado, pero a la inversa. Los cerca de 180 apoyos con los que contaban finalmente habían ido a parar a Bosquet. Y las llamadas se sucedieron.

Lejos de acabar, la polémica continúa a la vez que el líder de Ciudadanos sigue en silencio

En un primer momento no sospecharon del partido, aseguran las fuentes consultadas. Pensaron que gente que decía que iba a apoyar a Bretones decidió cambiar su voto a última hora o que no habían votado finalmente. Pero esa confianza en el partido se rompe meses más tarde cuando se destapa el pucherazo en las primarias de Castilla y León. Bretones "tenía los votos", afirman ahora con rotundidad, "tenía los apoyos para ganar".

En Andalucía las listas en Ciudadanos tienen formato cremallera. Otro de los motivos de sospecha que se plantea en Almería es que, solo un día antes de conocerse los cabezas de lista, que se decidieron el 15 de julio, el partido daba los nombres de los números 2 y 3. Hombre y mujer respectivamente -Andrés Ramón Samper y Mercedes María López-, lo que evidencia que el número uno, atendiendo a este formato, tenía que ser Bosquet puesto que era la única candidata mujer.

Al contrario de lo que sucedió en Castilla y León, no revisaron todos los datos en el sistema, aunque algunos de los afiliados que arropaban a Bretones sí descargaron algunos comprobantes de voto, pero la confianza en su partido no les llevó a ninguna acción más. Ahora sí quieren que Ciudadanos les garantice que no hubo pucherazo en sus primarias aunque ya hayan pasado meses desde aquello.

Sin integración

Bosquet ya ejercía entonces de portavoz de Ciudadanos en la provincia de Almería, era la numero dos del grupo naranja en el Parlamento Andaluz y además, formaba parte de la Ejecutiva nacional del partido. Era la candidata del aparato y como tal, la que recibía los apoyos de forma pública de sus compañeros de partido. La propia secretaria de Organización de Ciudadanos en Almería, Eva García, es solo un ejemplo que indignó a los defensores de las otras dos candidaturas.

Rafael Bretones, ex coordinador de Ciudadanos en El Ejido, dejó su cargo en su localidad para presentar su candidatura frente a Bosquet, como marcan los estatutos del partido. Sin embargo, tras la victoria de la almeriense, el nombre de Bretones no apareció integrado en la lista provincial pese al reclamo de los afiliados, que apelaban al gran respaldo obtenido, de casi la mitad de la militancia que votó de forma telemática. Eso indignó a los defensores de Bretones, agricultor de profesión y afiliado al partido desde el año 2015.

El entorno del ejidense ya se ha puesto manos a la obra para una posible reclamación a la Comisión de Garantías, que esta semana ya ha dado por buenas las primarias de Madrid y Murcia tras la solicitud de los candidatos derrotados. Pero antes quieren saber si después de todos estos meses los datos estarán todavía recogidos en algún sistema para que su petición no quede en papel mojado.

El caso almeriense es más complejo de resolver que el de Castilla y León tanto por el tiempo transcurrido desde aquellas primarias como por la posterior formación de Gobierno en Andalucía con los cabezas de lista elegidos en esas votaciones. Pero después de lo visto en el partido de Albert Rivera han saltado todas las alarmas. Lejos de acabar, la polémica continúa a la vez que el líder de Ciudadanos sigue en silencio.