El Corte Inglés ha 'reclutado' a empleados de seguridad de otras provincias para reforzar la protección de sus tiendas en Barcelona, ante los graves disturbios que se están registrando estos días en la capital catalana tras conocerse la sentencia del procés.

Según ha podido conocer El Independiente, el refuerzo está integrado por una decena de trabajadores, dos de los cuales proceden de Madrid, y han llegado a la capital catalana este miércoles. La compañía ha declinado hacer comentarios al tratarse de un asunto relacionado con la seguridad de sus centros.

La medida se produce después de que radicales prendieran fuego a las puertas de una tienda de Zara en el centro de Lleida que afectó a la fachada del edificio: las llamas reventaron la luna de un escaparate pero no penetraron en el interior del establecimiento, que ya se encontraba cerrado. En Girona, un establecimiento de Zara Home ha amanecido con la pintada 'Amancio, muérete' en su escaparate, en alusión al fundador y máximo accionista de Inditex, Amancio Ortega.

La compañía moviliza a una decena de empleados en vísperas de la manifestación convocada para este viernes en Barcelona

El incremento de personal de seguridad por parte de El Corte Inglés se produce en vísperas de la manifestación que el independentismo ha convocado este viernes en Barcelona como colofón a la jornada de huelga. Convocada a las 17 horas, la marcha partirá de los Jardines de Gracia y concluirá en la confluencia del Paseo de Gracia con Gran Vía.

Precisamente el Paseo de Gracia fue uno de los escenarios urbanos elegidos por los violentos durante la tarde-noche de este martes para montar barricadas en llamas en protesta por la sentencia por la que nueve dirigentes soberanistas han sido condenados por el Tribunal Supremo a penas de entre nueve y 13 años de prisión.

A no demasiada distancia tiene El Corte Inglés uno de sus buques insignia. El gran centro de Plaza Cataluña es desde hace años el de mayor rentabilidad de toda la red del grupo en España (el de mayor facturación anual sigue siendo el del Paseo de la Castellana de Madrid). Esa emblemática tienda se encuentra precisamente en uno de los principales puntos que neurálgicos de las protestas en Barcelona, en pleno centro de la ciudad.

Barcelona y su área metropolitana son el bastión del negocio de la compañía en Cataluña. En la provincia de Barcelona cuenta con siete centros, cinco en la Ciudad Condal (tres son grandes centros comerciales), uno en Sabadell y otro en Cornellá. La presencia en el resto de la comunidad es mucho menor, sólo con un centro en Girona y otro en Tarragona.

La factura que pasó el 1-O

No es la primera vez que El Corte Inglés sufre las consecuencias de la tensión política en Cataluña. El gigante español de los grandes almacenes sufrió un auténtico zarpazo a su negocio en la región, con un desplome histórico del 50% de sus ventas, en las semanas posteriores al referéndum legal del 1-O.

El mes de octubre y la primera mitad de noviembre de 2017 fueron nefastos para los centros que El Corte Inglés tiene en Cataluña, especialmente para los localizados en Barcelona. La compañía vio cómo en mes y medio se esfumaba la mitad de las ventas en relación a los niveles del año anterior, como desveló entonces El Independiente