"Yo, Manuel Valls, quiero ser uno de los protagonistas del cambio en Cataluña". Con esta afirmación y en compañía de la única concejal de su grupo municipal, Eva Parera, el ex primer ministro francés hacía girar cabezas en una rueda de prensa de Barcelona pel Canvi el pasado 17 de octubre. Sólo unos días después, la idea de postularse como candidato a la presidencia de la Generalitat ha ido ganando fuerza hasta convertirse en una realidad casi tangible.

Tal y como confirman fuentes cercanas a Valls a El Independiente, su periplo en el terreno político pasaría por presentarse a unas eventuales elecciones catalanas, una idea que "está en su cabeza desde hace mucho tiempo" y que ahora "ha ganado más fuerza por la situación que todos conocemos". Además, según afirma el entorno del ex primer ministro galo, "su andadura en Cataluña no estará bajo el paraguas de Ciudadanos", será independiente y tendrá como objetivo "unir al constitucionalismo" en un momento clave.

Valls no hará oficial su salto a la Generalitat antes del 10 de noviembre, en que los resultados serán determinantes para abrir esa puerta

Pero el anuncio no se hará oficial antes del 10 de noviembre, en que los resultados serán determinantes para abrir definitivamente la puerta al proyecto de una suerte de 'Catalunya pel Canvi' basado en la idea de "salir de las fronteras tradicionales de los partidos políticos" ."Yo soy un hombre de reflexión y tengo que hablar con mucha gente", declaraba en La Sexta este martes, aunque tiene claro que ve un espacio abierto. "Yo quiero ser útil en Cataluña" porque "necesita esperanza, no pequeña política".

Además, tal y como ha asegurado Valls este miércoles en una entrevista para la COPE, está en marcha una plataforma "de centro izquierda" y "abierta y constitucionalista" de la que forman parte figuras como Nicolás Redondo o Fernando Savater, un proyecto con tintes de sociedad civil que tiene como objetivo último ejercer presión en el panorama nacional pero que "no tendrá un calado político" ya que "Valls no se plantea ahora fundar un partido a nivel nacional", señala el entorno de ex primer ministro francés.

Según adelanta Vozpópuli este miércoles, tanto el nombre de la mencionada plataforma como el primer manifiesto fundacional se conocerá en un acto el próximo 30 de octubre en la capital española, concretamente en la sede de la Fundación Diario Madrid.

Aunque cada vez más voces del ala independentista pide al presidente de la Generalitat convocar elecciones "cuanto antes mejor", la negativa de Torra a hacerlo permanece intacta. Ante los graves disturbios y los episodios de violencia que vive Cataluña como respuesta a la sentencia del 'procés', el líder catalán ha asegurado en varias entrevistas, como la última concedida a TV3, que "lo últimos que podemos permitirnos son unas elecciones".

Un 'Errejón' para Rivera

Y todos los movimientos que baraja Valls tendrán un objetivo, si no premeditado, necesario. Según confirman en su entorno, desde que finalizase su relación con los naranjas, el concejal de Barcelona ha estado en contacto con ex dirigentes socialistas y críticos liberales, como Toni Roldán -quien en conversación con El Independiente ha descartado "de entrada" formar parte de la plataforma de Valls ni jugar papel alguno en la vida política, "ni en Ciudadanos ni en ningún otro"- o el cofundador de Cs, Francesc de Carreras, para estudiar la apertura de "alternativas".

El eventual proyecto de Valls en la Generalitat, con tinte conciliador, constitucionalista y europeísta, cazaría a un buen puñado de votantes de Ciudadanos, sobre todo del ala más progresista de los liberales y del electorado desencantado con las políticas de un Albert Rivera que experimentará, si se cumplen todos los pronósticos, el peor golpe de la historia del partido en unas generales.

Valls firmaba la salida de Ciudadanos después de contravenir las directrices de la dirección nacional y permitir la investidura de Ada Colau como alcaldesa de Barcelona, un movimiento que aún hoy genera fricciones. En una entrevista para esRadio, el líder liberal admitía el error que cometió el partido al abrir el paraguas al ex primer ministro francés en Barcelona, y que les sorprendió la actitud de Valls con la hoy regidora de la ciudad condal. "Lo que está haciendo Colau estos días demuestra por qué no hay que apoyarla", sentenciaba.