Ni en Portugal ni en la República Dominicana ni en Nueva Zelanda. Juan Carlos I se marchó de España el 3 de agosto sin decir a dónde, aunque sí el porqué: la repercusión de "ciertos acontecimientos pasados" de su vida privada. Después de 14 días de silencio, la Casa Real reveló ayer que el monarca permanece desde entonces en los Emiratos Árabes Unidos. El anunció resolvió así una de las grandes incógnitas del verano. Los periódicos y televisiones habían ubicado al emérito en distintos puntos del mundo. Pero hubo uno que acertó antes que nadie, El Chiringuito de Jugones, el programa de tertulia deportiva de Josep Pedrerol.

El breve comunicado de la Zarzuela no concreta cuánto tiempo permanecerá Juan Carlos en los Emiratos ni si será su destino definitivo. Durante estas dos semanas, la Casa Real ha defendido que debía ser el monarca el que comunicara su paradero. El Gobierno tampoco soltó prenda. Para el presidente Pedro Sánchez sólo Juan Carlos o la Casa del Rey eran los responsables de contar esa información.

El 'exilio voluntario' de Juan Carlos tuvo una gran repercusión a nivel internacional. En los últimos meses ha estado en el punto de mira de la Justicia. La Fiscalía del Tribunal Supremo está investigando si unas supuestas comisiones abonadas por Arabia Saudí al emérito terminaron en una cuenta a nombre de su ex amante Corinna Larsen. En una carta a su hijo Felipe VI publicada el 3 de agosto, Juan Carlos justificó que su marcha serviría para facilitar la "tranquilidad" y el "sosiego" que necesita el actual Rey para ejercer sus funciones. Tras la misiva, arrancó la carrera de los medios por tratar de localizarle.

De Portugal a Nueva Zelanda

Al día siguiente, 4 de agosto, algunas publicaciones situaron a Juan Carlos en la República Dominicana. El ABC apuntó que el Rey padre había viajado primero a Sanxenxo, en Pontevedra. Desde ahí se habría desplazado a Oporto para volar al aeropuerto de Santo Domingo y alojarse en el complejo turístico de su amigo Pepe Fanjul.

A su vez, algunos medios portugueses le colocaron en Portugal. Televisao Independente (TVI), por ejemplo, dijo que el monarca pudo haberse instalado en Estoril. Se trata de una localidad familiar para los Borbones. El padre de Juan Carlos, Juan, estuvo exiliado en Estoril y crió a su hijo antes de que regresara a España. El Confidencial también apuntó a Portugal como destino. Las fuentes consultadas por el digital afirmaron que Juan Carlos viajó en coche hasta Azeitao. En esta otra localidad le acogió una familia con la que guardaba una relación fraternal desde su juventud en Portugal, los Brito e Cunha-Espirito Santo.

Las informaciones sobre el paradero de Juan Carlos se repetían en los medios. Pero la Casa Real ni confirmaba ni desmentía. Unos días después, la prensa se acercó a la respuesta. El día 7, el ABC accedió a la hoja de ruta que el rey emérito emprendió el lunes 3. Al parecer, despegó en un jet privado alquilado a la compañía TAG Aviation, con sede en Malta. Este avión llegó el 2 de agosto a Vigo desde París. A la mañana siguiente, Juan Carlos se subió al aeroplano y voló rumbo Abu Dabi. Después de más de siete horas de viaje, el jet aterrizó en los Emiratos Árabes. Eran las 17:53 horas en España. Unos minutos más tarde, la Casa Real hizo pública la decisión. Ya en suelo árabe, un helicóptero trasladó al antiguo rey al lujoso hotel Emirates Palace.

Otro digital, NIUS, aportó más tarde la fotografía del monarca a su llegada a la capital de los Emiratos. En la instantánea aparece bajando las escaleras desplegables del avión y con la cara cubierta por una mascarilla. Hace una semana también se especuló que Nueva Zelanda sería el destino final de Juan Carlos.

La exclusiva, en la prensa deportiva

En esta carrera para averiguar el destino del emérito hubo un claro ganador. Ni ABC con la hoja de ruta del viaje ni NIUS con la fotografía en Abu Dabi. El primero en dar la exclusiva fue el periodista Edu Aguirre en El Chiringuito de Jugones, el popular programa de tertulia deportiva de Atresmedia.

Aguirre contó la noticia el mismo 3 de agosto, pocas horas después del comunicado de la Zarzuela. "Me ha llegado [la información] minutos antes de que empezase el programa. Vamos a dar un nombre, queremos que la gente apunte el nombre donde a día de hoy tiene en mente vivir el rey emérito", empezó diciendo. Aguirre explicó que antes, cuando Juan Carlos era Rey, volaba desde la base aérea de Torrejón de Ardoz con aviones militares. Ahora también vuela desde ahí, pero en otro tipo de aviones.

"El rey emérito ha cogido un avión que los controladores aéreos llaman Kilo Sierra, un avión que solamente sabe dónde vuela el piloto", añadió. Y por fin reveló la noticia: "Ahora mismo, Juan Carlos I no está en el país en el que va a acabar viviendo. Ahora mismo tiene en mente pasar y vivir en los Emiratos Árabes Unidos".

No se quedó ahí. Contó que la decisión de Juan Carlos se debía a su "magnífica" relación con el padre del actual presidente de Emiratos y que tenía una planta reservada en el Emirates Palace. "Si quiere discreción, Abu Dabi es donde más privacidad va a tener porque no hay libertad de prensa ahí, todo lo controla la monarquía".