Ocho incendios forestales en Galicia mantienen este miércoles fuego en 3.940 hectáreas en las provincias de A Coruña, Ourense y Pontevedra, aunque ya sin riesgo para núcleos poblados, informa la Consellería do Medio Rural de la Xunta. El incendio de As Pontes (A Coruña), parroquia homónima, iniciado a última hora de ayer y con 80 hectáreas afectadas, sigue activo pero ya registró la desactivación de la situación de riesgo para núcleos de población, que mantuvo la alerta por la noche.

En el mismo municipio arden otras 60 hectáreas en la parroquia de Vilavella, donde las llamas también arrancaron a última hora de ayer aunque quedaron estabilizadas a las 7:16 horas de hoy.

Boiro, parroquia de Cures, mantiene estabilizado el fuego que quema 2.200 hectáreas y que afecta a los municipios vecinos de Ribeira y A Pobra do Caramiñal desde la semana pasada.

En la provincia de Ourense hay dos incendios activos desde última hora de ayer, en Laza, parroquia de Camba, con 250 hectáreas, y en Chandrexa de Queixa, parroquia de Queixa, con 100 hectáreas.

Está también activo un fuego en Carballeda de Valdeorras, parroquia de Casaio, con 270 hectáreas, y permanece controlado otro en Verín, parroquia homónima, con 600 hectáreas.

En la provincia de Pontevedra el único incendio de consideración está controlado en Ponte Caldelas, parroquia de Xustáns, con 380 hectáreas.

Estos ocho fuegos suman 3.940 hectáreas y dan continuidad a un verano en el que los montes gallegos no han dejado de arder.

Medios de la Xunta y del Estado trabajan de manera coordinada para que los incendios pasen de activos a estabilizados, luego a controlados y, por último, a extinguidos.