En 1476 finalizó la creación en A Coruña de una de las obras culmen de la ilustración medieval y uno de los manuscritos hebreos más valiosos y hermosos del mundo, la Biblia Kennicott, que regresará a Galicia más de quinientos años después del exilio de sus propietarios para ser exhibida temporalmente en Compostela con motivo del Xacobeo 2021.

El director general de Políticas Culturales de la Xunta, Anxo Lorenzo, ha anunciado esta mañana, ante un facsímil de esta biblia, el acuerdo con la propietaria de la obra, la prestigiosa Biblioteca Bodleiana de la Universidad de Oxford, para que el manuscrito vuelva a Galicia durante seis meses.

Esta joya bibliográfica, encargada por un importante comerciante de A Coruña, Don Isaac, hijo de Salomón de Braga, tuvo una vida muy azarosa y, tras partir de A Coruña en torno a 1492 con el decreto de expulsión de los judíos promulgado por los Reyes Católicos, viajó a Portugal con sus propietarios.

Después, estuvo en el norte de África y Gibraltar y se le perdió el rastro durante unos 300 años, aunque mantuvo un excelente estado de conservación, hasta que en 1771 el responsable de la Biblioteca Radcliffe de la Universidad de Oxford, Benjamin Kennicott, gestionó su adquisición para los fondos de la institución.

Más de 200 páginas ilustradas de unas 930 que conforman este impresionante volumen

En 1872, la Biblia fue transferida a la Biblioteca Bodleiana, en la misma universidad, donde ha permanecido hasta la actualidad. Esta será la primera vez que se pueda ver en España este manuscrito, con más de 200 páginas ilustradas de unas 930 que conforman este impresionante volumen, el testimonio más importante de la presencia judía en Galicia en la Baja Edad Media, para lo que será trasladado desde Oxford con importantes medidas de seguridad dado su incalculable valor histórico.

Aunque se han realizado peticiones desde diversas entidades para que la biblia regrese de forma permanente a Galicia, desde la Xunta ven "difícil" poder siquiera pensarlo, ya que "si fue difícil gestionar un préstamo, conseguir un depósito o una cesión permanente sería mucho más difícil". "Hay que ser realistas", añade Anxo Lorenzo.

El comisario de la exposición, Manuel Gago, ha destacado de esta obra que "es una pieza extraordinaria y es casi lo único que nos queda de ese momento", pues debido a la "precipitada" marcha de los judíos "apenas nos quedan testimonios que no sean documentales".

Por su parte, el vicepresidente de la Fundación Hispanojudía, Alberto Ruiz-Gallardón, ha subrayado el "inmenso y fabuloso legado" que los judíos dejaron en España y "ejemplo" de ello es esta biblia, que constata que en Galicia hubo una comunidad judía abierta y con inquietudes, plasmadas en el carácter cosmopolita de un texto que también refleja la influencia del entorno cristiano y musulmán en esta comunidad, ha abundado.

Tras felicitar a la Xunta por lograr esta cesión de una institución "extremadamente exigente" a la hora de prestar sus obras, algo que "acredita el prestigio y solvencia técnica" del Gobierno gallego, Ruiz-Gallardón ha incidido en que la presencia de esta biblia puede significar "un símbolo de recuperación" y un "gesto de reconciliación y reparación" con la sociedad judía.

"Reparar el error histórico"

El vicepresidente de la Fundación Hispanojudía, que ha contribuido a sufragar parte de los gastos de la gestión del préstamo y seguro de la pieza, considera que con este tipo de iniciativas se contribuye a "reparar el error histórico" que supuso la expulsión de los judíos de España.

La Biblia Kennicott formará parte de la muestra "Galicia, un relato en el mundo", que se podrá visitar hasta el 12 de abril de 2020 y que contempla unas trescientas obras simbólicas sobre los mitos, historia y memoria de la identidad gallega a lo largo del tiempo y del mundo.

Entre ellas destacan piezas como la escultura Santa de Francisco Asorey; el Libro das Invasións, con la primera mención conocida a Breogán; el Mapa de Sawley, uno de los primeros mapa mundi enciclopédicos europeos en el que se representa la Catedral de Santiago como edificio más importante de Europa; o el Codex Arentinus de Arezzo y el Cancioneiro da Vaticana.