Los casos diagnosticados el día anterior han pasado de 71 el lunes a 137 el martes y 219 este miércoles, un incremento del 300% que Fernando Simón, portavoz del Comité Técnico para la Desescalada, ha achacado al "esfuerzo diagnóstico" que se está realizando y ha asegurado que las pruebas PCR se están realizando ya al 100% de casos sospechosos en hospitales y al 85% de los mismos en Atención Primaria.

"Las comunidades autónomas están haciendo un gran esfuerzo y se están detectando muchos más asintomáticos en cribados a grupos poblacionales", ha dicho Simón, que ha mantenido que la tendencia en número de contagios se mantiene en evolución descendente en cuanto a los casos con inicio de síntomas en los últimos siete o 15 días.

También ha tenido que dar hoy explicaciones Simón por las cifras de fallecidos, que este miércoles vuelven a chocar con las ofrecidas por las comunidades autónomas. Un solo muerto se ha añadido al total (27.128 fallecidos desde el inicio de la pandemia), aunque se han sumado 29 (hasta un total de 63) como los decesos ocurridos en la última semana. "A la cifra global solo sumamos los fallecidos el día anterior", ha afirmado, para asegurar que "los fallecidos se van a conocer todos pero llevamos un poco de retraso". Ayer ya anunció que la cifra de fallecidos se actualizará con 1.000 o 2.000 casos más de los que ahora figuran en las cifras oficiales.

Según Simón, los retrasos en la notificación de los fallecidos desde el 11 de mayo puede tener un retraso de "hasta tres días" (por lo que esos casos no se añadirían al total hasta la actualización global) y que en los que iniciaron síntomas antes del 11 de mayo - cuando se cambio el sistema - "el retraso puede ser mayor".

El portavoz para el coronavirus ha expresado hoy, a través de una gráfica, el porcentaje de casos que el Sistema ha sido capaz de detectar, tanto al inicio como en la fase posterior de la epidemia y ha presentado unas cifras de letalidad corregidas en base a los datos del estudio de seroprevalencia, que situó en alrededor del 10% el porcentaje de casos totales detectados por el sistema.

En base a ello, la letalidad real del COVID-19 en el total de la población es del 0,8%, una cifra que sin embargo no se reduce en la misma población para los jóvenes que para los mayores, donde la letalidad se situaría - a partir de los 70 años - en un 4,1%.

Simón también se ha referido hoy a la estadística dada a conocer hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE) que establece en 44.000 las defunciones acaecidas durante la pandemia y superiores a las del mismo período que el año pasado. Simón ha afirmado que esta comparación no tiene en cuenta otros factores - como la epidemia de gripe o la temperatura ocurrida ese año - y que puede hacer variar la mortalidad de un año a otro, algo que no ocurre en el Sistema de Vigilancia de la Mortalidad (MoMo) que compara un año con la media de los ocurridos en las dos décadas anteriores.

Aún así, Simón ha incidido en que las cifras oficiales de la epidemia recogen "un sesentaitantos por ciento del total, que son personas que tienen un diagnóstico positivo por coronavirus" y que del porcentaje restante no todas pueden achacarse a la epidemia. Como ya había indicado en anteriores comparecencias, el epidemiólogo justifica parte de esa mortalidad en "la gripe" o "personas que debido a la sobrecarga del sistema han retrasado su acceso a los servicios hospitalarios y han podido llegar tarde".