El Gobierno insiste en que siete de cada diez españoles estarán vacunados contra el coronavirus en verano. Una certeza que no comparte, al menos en su totalidad, el presidente de la Asociación Española de Vacunología, Amós José García Rojas: "Los sanitarios vamos a hacer todo lo posible para que el 70% de la población esté vacunada en verano, pero lamentablemente hay un factor que no podemos controlar y es el ritmo de llegada de las vacunas, que si sigue así va a ser muy difícil que se pueda conseguir".

España acaba de superar los dos millones de dosis recibidas y las comunidades autónomas han puesto el 89,6% de las dosis entregadas según los últimos datos del viernes. El porcentaje de reservas ha aumentado después de que en las últimas semanas las incidencias en llegada de vacunas y el alto porcentaje de vacunas administradas (más del 94%) obligaran a algunas autonomías como Cataluña y Madrid tuvieron que suspender sus planes de vacunación por la necesidad de guardar segundas dosis.

No obstante, García Rojas defiende que las comunidades autónomas "pusieran todas las vacunas disponibles" en las primeras semanas."La prioridad era proteger a los mayores de las residencias. Estábamos en un momento muy duro de la tercera ola y había que tratar de llegar al máximo número posible, al menos con una dosis. Después ya conforme se acercara la fecha de la segunda dosis, ir guardando reservas estratégicas, pero ya hay evidencias de que con la vacuna de Pfizer hay efectividad hasta en un espacio de 42 días".

García Rojas celebra la decisión de España de no vacunar a los mayores con la vacuna de Astrazeneca porque "la evidencia científica no es suficiente". Al menos de momento, hasta que "salgan resultados científicos de Reino Unido, que sí que está vacunando a los mayores". Mientras tanto, apuesta por "incluir en ella a otros grupos, como los jóvenes con patología de base o grupos esenciales. Y dar las de ARN a los mayores".

Entre los grupos esenciales, sin embargo, García Rojas no daría prioridad a los camareros o taxistas, como sugirió la Comunidad de Madrid hace unos días. "Creo que hacen un trabajo muy importante, pero los esenciales son otros. Los policías, bomberos, protección civil… Los camareros, taxistas y en general hostelería, o conductores, son importantes pero tendrían que ir por detrás", apunta.

Por otro lado, el presidente de la Asociación Española de Vacunología cree que el hecho de que la vacuna de Astrazeneca no se inocule a mayores de 55 años no tiene por qué afectar al calendario y pone el foco ahora en la vacuna que posiblemente será la próxima en aprobarse: "La vacuna de Janssen nos llena de esperanza a los profesionales, lo primero porque es una vacuna más, pero también porque tiene la ventaja de que basta con una dosis y eso nos haría ganar mucho tiempo. Además en los ensayos han incluido a mayores y no presenta problemas de conservación".

Con casi 700.000 personas ya vacunadas completamente y más de dos millones con al menos una dosis recibida, García Rojas cree que es positivo empezar a vislumbrar ya el final del túnel, pero con prudencia. "Vemos la luz al final del túnel, pero este túnel tiene muchísimos kilómetros, y si no nos protegemos bien esa luz se puede convertir en la de un expreso que viene de frente y con el que nos choquemos con efectos brutales", concluye, lo que relaciona con "mantener las medidas de protección aún estando vacunados, ya que no se sabe si protege de los contagios".