Tener una enfermedad mental supone, aún en la España de 2021, un estigma. Así lo vimos hace apenas unos días, cuando el Congreso vivió una escena lamentable mientras el diputado Íñigo Errejón intentaba hablar de la necesidad de mejorar la calidad de la atención a la salud mental. Por ello es tan importante hacer públicas este tipo de enfermedades que en España afectan a uno de cada 10 personas, según los datos de la Encuesta Nacional de Salud de España (ENSE) en 2017.

La última persona pública que ha confesado padecer un trastorno mental ha sido Rocío Carrasco, quien en una polémica entrevista ha mostrado su diagnóstico de trastorno ansioso depresivo mixto, con una intensidad de moderado a grave. La hija de Rocío Jurado, que denunciaba en la misma entrevista ser víctima de malos tratos, aseguraba que su enfermedad la ha mantenido años medicada e incluso haber tocado fondo con un intento de suicidio.

¿Qué es el trastorno ansioso depresivo mixto?

"El trastorno ansioso depresivo mixto es una enfermedad en la que coexisten síntomas del trastorno de ansiedad con otros de depresión", explica Josep Ramon Domenech, presidente de la Asociación Española de Psiquiatría Privada, quien subraya que aunque la patología puede ser de grado leve, moderado o grave, el hecho de que se mezclen ambos trastornos implica ya de por sí un agravamiento del pronóstico. S0bre el caso de Rocío Carrasco, cuyo diagnóstico habla de un trastorno "moderado grave", el psiquiatra explica que "es de importante relevancia clínica. Para determinarlo, el especialista valora tanto la intensidad de los síntomas como el tiempo de duración de los mismos. A más tiempo, mayor se estimará la gravedad".

Domenech subraya que hay elementos que diferencian la ansiedad y la depresión y que en este trastorno se desarrollan unos con más fuerza que otros pero sin que pueda diagnosticarse únicamente una de las dos patologías. "La ansiedad la caracteriza una preocupación constante, que se vincula al presente o al futuro, mientras que en la depresión predomina un sentimiento de culpa más vinculado al pasado. La ansiedad es un cuadro que suele empeorar por la tarde, mientras que en la depresión se suele mejorar por la tarde noche", explica el psiquiatra.

Síntomas del trastorno ansioso depresivo mixto

Ambas dolencias comparten "malestar y tensión, problemas para conciliar el sueño", añade. Algunas personas presentan "una base de ansiedad, que cuando no se mejora, aparecen síntomas de depresión".

Entre los síntomas de la ansiedad, según la Guía de buena práctica clínica en ansiedad y depresión publicada por la Organización Médica Colegial, están la preocupación, la tensión nerviosa subjetiva, la la irritabilidad, la baja autoconfianza, la tensión muscular, los dolores tensionales, sueño insuficiente y retrasado, ansiedad flotante, preocupación por la salud y ansiedad observada.

En el caso de la depresión, los síntomas más característicos son la pérdida de interés, la depresión observada por el clínico, la desesperanza, la autodepreciación, la falta de energía, pérdida de la libido y del apetito. También la preocupación por la salud, pensamiento subjetivo de ineficiencia, aislamiento social, lentitud, escasa actividad, despertar temprano, pérdida de peso debido a disminución del apetito y variación diurna con mejoría
vespertina.

También destaca Domenech que quienes padecen este trastorno tienen sintomatología física, "desde dolores musculares a síntomas de opresión torácica, taquicardias, mareos o náuseas, y otros muchos que se asocian a esta sintomatología de ansiedad y depresión".

En el caso de la ideación suicida - como le ocurrió según su propia confesión a Rocío Carrasco - Domenech apunta a que es más característico de los trastornos de depresión y que en esos casos "la ansiedad no ayuda, al contrario, los puede agravar".

Cuánta gente lo padece en España

Los estudios epidemiológicos que recoge la guía de la OMC muestran una incidencia de este trastorno en población general de entre el 0,8 y el 2,5%. En atención primaria, la prevalencia del trastorno es del 6,7%.

El trastorno ansioso depresivo mixto se encuadra en el grupo de trastornos de ansiedad y su denominación específica fue incluida por primera vez en 1992 por la Organización Mundial de la Salud.

La mezcla de ambos trastornos es relativamente común. La guía de la OMC recoge que entre el 50 y el 70% de los pacientes con un trastorno depresivo presentan sintomatología ansiosa grave. En general, quienes padecen depresión tienen un riesgo de 9 a 19 veces superior de sufrir un trastorno de ansiedad, y lo presentan, a lo largo de su vida, en el 58% de los casos.

Aunque muchos de estos trastornos se tratan directamente en atención primaria, la guía de la OMC subraya que la ideación suicida y la falta de respuesta a tratamientos son causa de derivación a psiquiatría.

Domenech subraya las dificultades que la pandemia está provocando a la evolución de las enfermedades mentales. "Estamos viendo un incremento muy notable de trastornos como éste y va a empeorar. Es necesario abordarlo ya", concluye.