Los mayores de 65 años ya se contagian un 27% menos que la población general

Los ensayos clínicos de las vacunas frente al Covid mostraron su eficacia frente a las muertes y la enfermedad grave. Menos claro estaba su efecto frente a los contagios, aunque algunos estudios ya han empezado a mostrar también el efecto a la hora de prevenir la transmisión.

En los últimos días, además de la evidencia científica, la situación epidémica empieza también a dar cuenta de ello. Según el último informe epidemiológico del Ministerio de Sanidad, del 22 de abril, la diferencia entre la incidencia del virus en mayores de 65 años respecto a la población general es ya del 27% y en algunas comunidades autónomas supera el 40%.

Así es por ejemplo en Cantabria, donde la incidencia del virus es de 217 casos por cada 100.000 habitantes, pero de 121 si se toman solo los contagios en mayores de 65 años, un 44% menos. Andalucía, con un 41% de diferencia, es la segunda comunidad.

Incidencia acumulada a 14 días en población general, mayores de 65 años y diferencia entre ambas

Solamente una ciudad autónoma, Melilla, tiene un mayor porcentaje de contagios en los últimos días en población mayor de 65 años que en la población general. Además de Melilla, dos islas - La Gomera y El Hierro - tienen también una incidencia superior en edades más avanzadas. No obstante, fuentes de la Consejería de Salud de Canarias afirman a El Independiente que "se trata de brotes localizados que no preocupan a nivel de salud pública" y que "hacen que aumente la incidencia al tratarse de poblaciones tan pequeñas". El Hierro tiene una población de 11.147 habitantes por lo que 30 casos elevan su incidencia general a los 264.

Por encima de los 250 casos a 14 días por cada 100.000 habitantes mayores de 65 años - lo que según los indicadores de vigilancia en España se califica de riesgo extremo - están en España 10 provincias y ciudades autónomas. Son, además de las ya mencionadas, Guipúzcoa, Álava, Lleida, Ceuta, Guadalajara, Navarra, Madrid y Granada.

Esta bajada de contagios se une a otros indicadores que ya evidencian el efecto de las vacunas en la epidemia. Uno de los principales es el de la caída de fallecimientos, ingresos y transmisión en las residencias de mayores, que fueron focos de mortalidad sobre todo en la primera ola. Los informes semanales del IMSERSO sobre la situación en las residencias recogen la tendencia a la baja de todos estos indicadores, que desde febrero a abril han hecho caer los contagios de cifras con cuatro dígitos a dos y las muertes de superar las cientos semanales hasta febrero a las cinco o siete de las últimas dos semanas.

Por primera vez hay menos exceso de mortalidad en mayores de 74 años

Así mismo, el registro de vigilancia de la mortalidad - sistema MoMo - ha registrado en abril un período de exceso de mortalidad entre los días 12 y 20 del 5,9% que por primera vez desde todos los informes de exceso de mortalidad, es menor en el grupo de los mayores de 74 años, donde se queda en un 4,7%.

Es significativa esta caída de la mortalidad en personas a partir de 75 años donde en los cinco períodos recogidos por el MoMO había sido mayor. Los anteriores fueron de marzo a mayo de 2020, julio y agosto de 2020, septiembre a diciembre de 2020, enero y febrero de 2021 y este último en abril.

En este último periodo, el exceso de mortalidad se centra en las personas entre 65 y 74 años, donde el virus aún presenta mayor riesgo para la población pero la vacunación aún no se ha generalizado como en tramos de edad superiores.