Una vez más el partido de Santiago Abascal se ausentará de una celebración oficial en lo que va de año para no coincidir con Pedro Sánchez o los miembros del Ejecutivo. Desde el 12-O, donde Abascal -y los suyos- decidió no ubicarse en la tribuna de autoridades ante el desfile militar del Día de la Hispanidad para no compartir espacios con un Gobierno "corrupto" y al que "no hay que normalizar" -a raíz de las investigaciones de la UCO o el encarcelamiento de Santos Cerdán, y ahora de José Luis Ábalos-, el partido decidió tomar esta estrategia. Se replicó de nuevo recientemente, en la conmemoración del 50 aniversario de la instauración de la monarquía parlamentaria en España. Desde el partido aseguran que no es un desplante a la Corona, sino a la connivencia con un Gobierno "instalado en la corrupción y la ilegitimidad".

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"Como en años anteriores, Vox no participará en los actos por el día de la Constitución celebrados en el Congreso. Ni este partido ni su grupo parlamentario comparte espacio con un Gobierno instalado en la corrupción y la ilegitimidad. Tampoco con sus representantes en el Congreso, que traicionan a diario los intereses de los españoles y que han hecho de los pactos con los enemigos de España su forma de aferrarse al poder. Un Gobierno que ha colonizado todas las instituciones, llenándolas de corrupción", dicen fuentes nacionales de la formación.

El mismo argumento se dio el año pasado. Igualmente en 2023, asegurando que tras el pacto de investidura y la promesa de amnistía "el Gobierno y sus socios han pisoteado la Carta Magna". En 2022 se acusó al Gobierno de vulnerar la Constitución sistemáticamente.

En esta edición, la 47, Vox sí que marca un antes y un después. Bajo esa idea de no compartir espacios más allá de las sesiones parlamentarias y de control al Gobierno, los de Abascal renuncian a acudir al izado de bandera a las 10:30 horas previo al discurso que la presidenta del Congreso, Francina Armengol, protagonizará en el Salón de los Pasos Perdidos a partir de las 12 horas. "En coherencia con la actuación de Vox el pasado 12 de octubre, tampoco estaremos en el izado de bandera. No podemos compartir espacio con un Gobierno corrupto que utiliza a las instituciones más queridas por los españoles como la Corona y el Ejército para blanquear su corrupción y fingir una normalidad institucional que no existe".

Según comunican fuentes de la formación, la portavoz parlamentaria, Pepa Millán, a quien le correspondería acudir a ese breve desfile e izado de la bandera envió recientemente una carta al jefe del Estado Mayor de la defensa "para agradecerle la invitación y explicar los motivos de nuestra ausencia". En donde sí participará Millán es frente al micrófono que cotidianamente se instala en el patio del Congreso y donde diferentes personalidades, desde portavoces parlamentarios a diputados y presidentes de partidos nacionales o de comunidades autónomas suelen intervenir. Hay fijada unas declaraciones a las once de la mañana de este sábado.

La decisión de Vox coincide con la de los grupos independentistas, nacionalistas y de Podemos, por el rechazo a la Corona o a partes de una Constitución que no consideran adecuadas. El PNV, por ejemplo, históricamente se ha ausentado. En 1978 se abstuvo a ese texto constitucional, que critica por verlo limitado de cara al autogobierno del País Vasco. En el caso de Ione Belarra e Irene Montero, éstas participarán en la campaña electoral de Extremadura este sábado.

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