El acopio de papel higiénico, legumbres y conservas ha ido quedando atrás a medida que ha ido avanzando la pandemia y el confinamiento. De hecho, la llegada de la fase 1 a la mitad de España provocó que el consumo cayese un 7,5% con respecto a la semana anterior.

Desde que se decretó el estado de alarma, el consumo semanal se ha reducido en cuatro ocasiones. La primera fue tras las primeras colas en los supermercados, entre el 16 y el 22 de marzo, las compras cayeron un 20,2% después de las primeras aglomeraciones. También lo hicieron durante el puente de mayo, un 1,4% y también la semana entre el 20 y el 26 de abril, un 2,8%.

Los últimos datos publicados por el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca señalan que en la semana del 11 al 17 de mayo, se produjo la mayor caída semanal desde el 22 de marzo. Las compras en los supermercados se redujeron un 11,5%, los hipermercados perdieron un 2,1% y las compras en el comercio tradicional cayeron un 4,9%. Los compradores de supermercados como Aldi o Dia, agrupados bajo la etiqueta de Tiendas de descuento, acudieron también menos que en la semana anterior (-8,4%) y las compras online fueron un 12,8% menores.

“El hipermercado es el canal dinámico que, aunque con crecimientos, no alcanza una evolución tan positiva como el resto”, indica el Ministerio. Este dato, junto con el incremento interanual del consumo en el comercio tradicional, se explica por las compras realizadas más cerca del hogar que se han producido durante el confinamiento.

Productos

Sólo tres categorías de alimentación aumentaron sus ventas con respecto a la semana anterior: el arroz, la pasta y las bebidas espirituosas. Si se observa la diferencia con respecto a la misma semana de 2019, los españoles han comprado más del doble de bebidas alcohólicas (+111,5%) y un 142,3% más de harinas y sémolas.

“En algunas categorías de alimentos y bebidas hay que tener en cuenta el peso que tradicionalmente tienen en el canal de hostelería y restauración que es mayor que en el canal del consumo en hogares”, explica el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. Una explicación que puede atribuirse a la compra de bebidas espirituosas.

Sin embargo, advierten “que aunque haya incrementos de compra en los hogares más pronunciados frente al mismo periodo del año anterior, estos incremento no suponen una recuperación del consumo total (hogares+fuera del hogar)”. Es decir, que los aumentos en bebidas alcohólicas en el hogar, no son suficientes para suplir el consumo habitual en el canal de la restauración.

Por comunidades, Cantabria es la comunidad donde más se redujeron las compras con respecto a la semana anterior, un 21%. En Asturias, junto con Madrid, también cayeron más de un 11%, es decir, por encima de la media. Cabe recordar que tanto Asturias como Cantabria pasaron a la fase 1 en su totalidad el 11 de mayo, no ocurre lo mismo con Madrid, que no cambió de fase hasta este lunes 25.

Diferencias interanuales

Con respecto a la misma semana de 2019, el consumo en los hogares fue un 27% superior entre el 11 y el 17 de mayo. La mayor diferencia durante el confinamiento se produjo en la semana del 13 al 19 de abril, cuando fue un 50,6% superior a 2019.

“La evolución de semanas pasadas indica que seguirán importantes crecimientos interanuales de consumo en el hogar mientras se mantenga el confinamiento y no sea posible consumir fuera de casa”, apunta Agricultura. Es decir, que las comparaciones con respecto al año pasado, seguirán siendo de crecimiento mientras España avanza hacia las distintas fases.