El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, presentó hace diez días el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de la Economía Española, un plan financiado por la Unión Europa y de 140.000 millones de euros entre transferencias y créditos a devolver.

Ahora, según publica El País, el Ejecutivo renuncia a la segunda parte de esos recursos, a la de los créditos, para que la deuda no siga creciendo. En total, Moncloa utilizará 59.000 millones del Fondo de Recuperación Europeo y otros 12.400 millones correspondientes a React-EU, un fondo que administrarán prácticamente en su totalidad las comunidades autónomas.

Así, pese al anuncio reiterado de los 140.000 millones de euros para reactivar la economía, lo cierto es que entre 2021 y 2023, Sánchez sólo recurrirá a la mitad. "Serán 72.000 millones de euros para el periodo 2021-2023. Repito serán 72.000 millones de euros para el periodo 2021-2023", apuntó el presidente en la presentación del plan en el que prometió la creación de 800.000 puestos de trabajo.

Calviño asegura que "hay tiempo"

Este lunes, la vicepresidenta de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, ha explicado en una entrevista en RNE que el plan del Ejecutivo pasa por utilizar en una primera fase los 72.000 millones de euros. La responsable económica ha subrayado que el Gobierno no renuncia "en absoluto" a los créditos.

"La prioridad tiene que ser ejecutar las inversiones que se pueden financiar con esas transferencias. Si hace falta más, recurriremos a los créditos, pero para los créditos tenemos más tiempo, seis años, y por eso podemos plantear un plan en dos fases y es lo que hemos hecho", ha explicado Calviño.

Según las cifras que proporcionó el Ejecutivo, de invertir los 140.000 millones de euros a los que podría optar España (entre transferencias y créditos) se impulsaría la economía a un nivel equivalente al 11,2% del PIB.

Deuda

El plan de Moncloa es el de empezar a reducir el déficit y la deuda cuando la economía recupere su crecimiento. Por ello, el Gobierno habría renunciado a pedir ya los créditos, para evitar que la deuda pública se dispare más.

La previsión macroeconómica es que la deuda alcance el 118,4% este año y se empiece a reducir en 2021. Para el próximo año, el Gobierno estima que la deuda se situará en el 117,4% del PIB.