Con la inflación disparada al 10,2%, incremento no visto en España en 37 años, los trabajadores de la hostelería y la banca solo van a ver subir sus sueldos un 1% este año. Concretamente, un 1,13% y un 1,08%, según los datos de la Estadística de Convenios Colectivos que ha publicado este lunes el Ministerio de Trabajo y Economía Social.
Las cifras muestran cuál ha sido el incremento salarial medio que empresas y trabajadores han acordado en lo que va de año -hasta junio, inclusive- en el marco de la negociación colectiva, tanto en convenios de empresa como en convenios de sector. La estadística revela que la banca y la hostelería son los sectores en los que menos van a subir los sueldos este año, algo que repercutirá directamente en las vidas de sus 280.000 y 503.000 empleados, respectivamente, de todo el territorio nacional.
El personal doméstico y el de las actividades recreativas son quienes, por ahora, van a vivir mayores crecimientos de sus nóminas, aunque en ningún caso compensarán a la inflación prevista para este año, de alrededor del 7,5% -aunque el dato podría ser mayor: actualmente, los diferentes organismos económicos están revisando sus previsiones por la prolongación de la guerra en Ucrania-. Los trabajadores de las actividades de los hogares han negociado una variación salarial del 6,3% y los de las actividades artísticas, recreativas y entretenimiento, de un 3,66%.
Con las mayores subidas salariales les siguen los empleados del transporte y el almacenamiento (+3,29%), los de los suministros de agua, saneamiento y gestión de residuos (+3,21%), los de la construcción (+3,15%) y los de la industria manufacturera (+3,11%). En total, la variación salarial media pactada por todos los sectores hasta junio -inclusive- ha sido de un 2,45%, casi 8 puntos por debajo de la inflación de ese mes y cinco por debajo de la inflación media esperada para este año.
Los datos también muestran cómo la firma de nuevos convenios se ha ralentizado, coincidiendo con la inflación desbocada y con la llamada de los sindicatos a detener las renovaciones de convenios si los empresarios no aceptan incluir en ellos cláusulas de garantía salarial, que permitan a los trabajadores recuperar el poder adquisitivo perdido en caso de que a final de año el incremento salarial sea inferior al dato de inflación media anual. Así, mientras que en mayo se firmaron 108 convenios, en junio han sido solo 91.
En lo que va de año, se han ratificado 344 convenios. Son más, sin embargo, que los registrados hasta junio del año pasado, cuando se habían firmado solo 226. No obstante, esos 226 convenios protegían entonces a 930.000 trabajadores y este año los 344 solo protegen a 680.000.
El sector público sale perdiendo
Por ámbito funcional, la estadística también muestra que los salarios sobre todo han subido en la empresa privada (un 2,86%, de media) y que donde menos lo han hecho ha sido en la Administración del Estado y la Seguridad Social (+2%). Esta última cifra tiene que ver con que el Gobierno insiste en que no va a contribuir a generar una espiral de inflación, que los economistas mantienen que se produciría si los sueldos se revalorizan tanto como los precios, o una cifra similar.
Por eso, los sindicatos CCOO y CSIF, los mayoritarios del sector público, han convocado movilizaciones para exigir al Ejecutivo que revise sus sueldos. CSIF considera que los empleados públicos han perdido más de un 15% de poder adquisitivo desde que en 2010 se les recortase la nómina entre un 5% y un 10%. Por eso, ha pedido a los grupos parlamentarios que pidan en el Congreso una mejora salarial para los funcionarios acorde a la inflación de este año, y que se fije un calendario de negociación para la recuperación del poder adquisitivo perdido "en un plazo razonable".
Por su parte, CCOO ha convocado una concentración este jueves frente al Congreso de los Diputados, donde se estará celebrando el Debate sobre el Estado de la Nación, para protestar por la "paralización" de la negociación colectiva en la Función Pública. Los sindicatos llevan meses exigiendo a la ministra del ramo, María Jesús Montero, reuniones para negociar este incremento salarial, pero el Gobierno no ha atendido sus peticiones.
Un pacto de rentas ya alcanzado "de facto"
La ínfima subida salarial media que se ha negociado en lo que va de año supone una gran pérdida salarial para los trabajadores, de unos 1.100 euros al cabo del año, según calculó este medio; pero a la vez implica que "de facto" se ha alcanzado un pacto de rentas, ese acuerdo que el Gobierno pretende impulsar entre sindicatos y empresarios. El objetivo de dicho contrato, similar a los pactos de la Moncloa de los 70, es contener las alzas salariales, y a la vista de los datos ya están conteniéndose.
Para el Ejecutivo, es importante que los sindicatos y los empresarios lleguen a un acuerdo para contener las subidas de los precios, aunque todavía no ha definido en qué debería consistir este. Para los economistas, como también ha explicado ya este periódico, es imprescindible que los trabajadores pierdan poder adquisitivo con el objetivo de ayudar a contener la inflación, pero también que lo hagan las empresas -aunque no está claro de qué manera se podría conseguir-, así como limitar los alquileres. El Gobierno convocó a los agentes sociales la semana pasada para negociar esta cuestión, y volverá a hacerlo, aún sin una fecha definida.
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